La farmacia, un pilar fundamental en la correcta alimentación del mayor
COLEGIO DE FARMACÉUTICOS DE CÁDIZ
Los mayores son una constante preocupación para los farmacéuticos, pendientes de los medicamentos que utilizan, su alimentación, sus hábitos de vida y otros aspectos
EL progresivo aumento de la esperanza de vida dibuja nuevos escenarios y retos para el sistema sanitario y los profesionales de la salud, entre los que nos encontramos los farmacéuticos.
Con esta perspectiva, el Colegio de Farmacéuticos de Cádiz ha llevado una pionera campaña sanitaria entre los mayores desde las oficinas de farmacia de la provincia, que ha puesto de manifiesto aspectos que deben mejorarse para ganar en salud y calidad de vida.
En efecto, el sedentarismo, problemas de obesidad, efectos concomitantes de la medicación que deben corregirse, alimentación poco equilibrada, falta de ejercicio físico,… aconsejan llevar a cabo intervenciones, en ocasiones sencillas, pero necesarias para alcanzar una salud óptima entre nuestros mayores. Para ello es esencial la colaboración de familiares y cuidadores en esta labor, siendo la farmacia el punto de referencia para recibir información y consejos que permitan alcanzar dichos objetivos saludables.
A partir de esta campaña, expertos de la Universidad de Cádiz y geriatras de la provincia están colaborando con el Colegio para diseñar estrategias que faciliten una vida sana de nuestros mayores.
El desgaste vital y la aparición de patologías crónicas en este grupo de población, conllevan tratamientos farmacológicos complejos que exigen una especial vigilancia al influir en su actividad física, estado nutricional, interacciones con alimentos aumento de peso, pérdida de masa muscular, etc.
El exceso de peso en mayores de 65 años está presente en 8 de cada 10 personas y desde la última década esta cifra no para de crecer. Esta ha sido una de la motivaciones de esta campaña, donde junto a otros expertos queremos implementar iniciativas en salud para prevenir este aumento de peso y así obtener un salud más óptima entre nuestro mayores de 65 años.
Hay que tener presente que este exceso de peso es uno de los principales factores de riesgo en la aparición de enfermedades crónicas como la diabetes, la hipertensión, la hipercolesterolemia u otras complicaciones como el síndrome de apnea del sueño o la insuficiencia venosa.Además, la acumulación de grasa, especialmente en la zona abdominal, se relaciona con un aumento del riesgo de enfermedad cardiovascular.
Asimismo, la obesidad en personas mayores puede alterar la función de distintos órganos, como el hígado, y deteriora la musculatura, haciendo que se pierda movilidad. Y es que la acumulación de peso suele ser ir en detrimento de la masa muscular, por lo que la persona mayor se ve cada vez con menos fuerza para mover y sostener su cuerpo dificultando su movilidad y provocando el sedentarismo.
Evitar las complicaciones derivadas de la obesidad en personas mayores es importante para asegurar un envejecimiento de calidad. ¿Cómo conseguirlo? Fundamentalmente, bajo el asesoramiento de un profesional sanitario para que pueda ofrecer un correcto consejo personalizado.
La farmacia, por cercanía, accesibilidad y confianza puede ser un espacio propicio para encontrar la recomendación de un experto en salud como es el farmacéutico, quien no sólo ofrecerá indicaciones sobre hábitos saludables, sino que también realizará un control de los tratamientos del paciente y de los efectos que pueden tener en su peso.
Algunas recomendaciones
Algunas de las recomendaciones que efectuamos desde el Colegio de Farmacéuticos de Cádiz con el fin de que las personas mayores tengan un peso adecuado y, por añadidura, disfruten de una buena calidad de vida, son las siguientes:
Comer con moderación
Hay que fraccionar la dieta en cinco comidas diarias, siendo el desayuno la más importante, el cual debe contener un lácteo, una fruta y un cereal. La dieta debe ser variada y equilibrada para asegurar la presencia de todos los nutrientes.
Las comidas deben ser sencillas y de fácil preparación, evitando dietas monótonas.
Comidas sencillas
Las comidas deben ser sencillas y de fácil preparación, evitando dietas monótonas.
Alimentos densos
La dieta debe contener alimentos de elevada densidad nutritiva, como frutas, vegetales, pan y cereales integrales, pasta, legumbres o frutos secos.
Variedad
Realizar una dieta con alta variedad de frutas y verduras. Se recomienda el consumo de dos raciones diarias de verduras, al menos una de ellas en crudo, y tres raciones de frutas.
Consumir pescados y carnes
El pescado graso es recomendable por su contenido en omega-3, proteínas, vitamina D y calcio. Las carnes deben ser preferentemente magras y moderar lo más posible las carnes rojas y embutidos. La recomendación de cada uno es de tres o cuatro raciones por semana.
Aumentar consumo de fibra
Consumir cereales integrales, frutas, hortalizas y legumbres. Las recomendaciones del grupo de cereales y derivados es de seis o más raciones al día, mientras que de legumbres es de dos o tres veces por semana.
Moderación
Moderar el consumo de azúcar y sal, y reducir el consumo de grasa y alimentos grasos consumiendo alimentos vegetales, especialmente aceite de oliva para cocinar y aderezar. Consumir leche y productos lácteos desnatados o semidesnatados, enriquecidos en vitaminas. Su recomendación es de tres raciones al día.
Actividad física
Realizar actividad física acorde a las posibilidades de la persona. Una buena opción puede ser dar un paseo diario, preferiblemente con exposición moderada al sol. Si es posible, se recomienda llevar a cabo al menos una hora de actividad.
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