¿Cómo evitar sentir ahogo con las mascarillas?

El Ministerio de Sanidad ha decidido poner a la población el uso obligatorio de mascarillas en espacios cerrados y la vía pública siempre que no se pueda mantener la distancia de seguridad de dos metros entre personas. Esta decisión, según el ministro Salvador Illa, está basada en que el uso de esta herramienta sanitaria ha conseguido frenar el contagio del coronavirus a lo largo de estos meses de pandemia.

A favor o en contra, lo cierto es que la sociedad deberá adecuarse a las circunstancias y hacer suyas unas mascarillas que acompañarán hasta que se proclame el fin del estado de alarma, previsiblemente, a final del mes de junio.

El Ministerio de Sanidad ha especificado que existirán grupos exentos de la utilización de mascarillas ya sea por enfermedades respiratorias o de otra índole que esté justificada de manera adecuada. Ahora bien, hay pequeños grupos de población que sí deberán hacer uso de las mascarillas aun teniendo problemas severos como puede ser la ansiedad. Para aquellas personas que sufran en silencio esta medida hay una serie de consejos que aliviarán, en la medida de lo posible, esta nueva medida:

• Si la mascarilla resulta incómoda, deberá reajustarse ya que en muchos casos se debe a un uso incorrecto de la misma. Si el problema persiste, puede que las dimensiones no se ajusten a su perfil y habrá que buscar una más adecuada. por último, el Gobierno no ha especificado qué tipo de mascarilla usar, por lo que podrá utilizar la más cómoda.
• Como toda rutina, se debe a la falta de costumbre. Las personas pueden sentirse incómodas los primeros días al ser una situación nueva que necesita tiempo para que, tanto la mente como el cuerpo, la asimile.
• Reutilización abusiva de las mascarillas. Se debe en todo momento seguir las directrices del fabricante y no utilizar las mascarillas más tiempo del que se especifica en las indicaciones de la misma. Su uso abusivo puede provocar saturación y falta de oxígeno.
• No alarmase por los cambios de temperatura. La utilización de las mascarillas provoca una respiración más rápida por lo que el sujeto puede apreciar una subida de temperatura que se deberá a este factor y a otros medioambientales.
• Lo hemos visto durante toda la pandemia. Hay que tener especial cuidado con aquellas mascarillas que no cumplan los requisitos sanitarios o especificaciones legales y técnicas.

En definitiva, las mascarillas han demostrado ser un instrumento necesario para evitar el contagio entre la población, una población que deberá acostumbrarse a una medida que acompañará el día a día hasta los inicios del verano.