¿Si estoy en casa debo lavarme tanto las manos?
El COVID-19 sigue extendiéndose por todo el mundo y los infectados no paran de crecer. Desde el principio de esta pandemia se habló de las estrictas medidas que había que seguir para evitar la propagación del virus y se promulgaron algunos consejos para ello.
Entre estos consejos, el primero de ellos fue el de lavarse muy a menudo las manos. Entonces, todavía no estaba decretado el Estado de Alarma y las calles seguían una rutina normal.
Pero, actualmente, con las medidas existentes y encerrados en casa, ¿es necesario seguir lavándose las manos con tanta asiduidad?
Pues sí. De hecho, desde el Ministerio de Sanidad han realizado un vídeo que han publicado en su cuenta de Twitter en el que explican de manera clara y sencilla cuando hay que lavarse las manos, incluso cuando se está confinado en casa sin salir.
Una de las ocasiones en las que hay que lavarse las manos en casa según el Ministerio de Sanidad es siempre antes de comer.
Además, es fundamental asearse las manos al ir al baño, tanto antes como después.
Asimismo, al estornudar o al toser, se recomienda también acudir al lavabo y usar el agua y jabón.
Cómo lavarse las manos
Aunque siempre ha sido útil conocer cómo hacerlo, en la actual crisis sanitaria se convierte en una asignatura obligatoria por su importancia para evitar contagios y, a la postre, salvar vidas.
Igual de importante que lavarse las manos asiduamente es hacerlo de manera correcta. Incluso Google, hace unos días, indicó a través de su doodle, cómo hacerlo.
En el vídeo tutorial que el buscador mostró en su portada se mostraba paso a paso cómo lavarse las manos de forma correcta: primero mojarlas, luego el enjabonado, limpieza de palmas y dorsos, entre los dedos restregándolos y poniendo especial énfasis en los pulgares y, finalmente, enjuagado.
Lavarse las manos sólo con agua no es suficiente, es una práctica extendida en todo el mundo, pero es mucho menos efectivo que hacerlo utilizando jabón. Para lavarse las manos de manera adecuada se debe utilizar jabón, que favorece la frotación.
Otro punto esencial que apuntan los expertos es el tiempo de lavado. No hay que correr. Al menos, hay que estar un minuto frotándose las manos con jabón.
Además, si convertimos la práctica del lavado de manos en habitual, lo extendemos en el tiempo y, sobre todo, educamos a los niños en esta acción, en el futuro, evitaremos el contagio de numerosas enfermedades.
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