Aprende a conservar el jamón ibérico en buenas condiciones esta Navidad
Gastronomía
Es uno de los principales protagonistas gastronómicos cada final de año en España
Cinco claves para elegir el jamón ibérico estas navidades
En nuestro país, ya sabemos que en Navidades el jamón ibérico es uno de los mayores protagonistas gastronómicos. ¡Y es que es uno de los regalos con los que siempre acertar! Muchas veces recibimos el jamón en casa con las cestas de navidad, o regalo de algún familiar y amigo, pero una de las dudas que pueden surgir es ¿por dónde empiezo a cortarlo? ¿cuál es la mejor forma? ¿cómo lo conservo?
Desde la empresa de ibéricos Enrique García, que lleva más de 100 años en este negocio tan tradicional en nuestro país, han querido darnos algunos trucos para comenzar con la cata de la forma más eficiente posible. “Para poder disfrutar del sabor y sacarle el mejor partido, os queremos dejar algunos de nuestros trucos como expertos para que podáis hacerlo en vuestra casa y disfrutar del jamón en las mejores condiciones” nos comentan.
Consejos para conservar perfectamente un jamón ibérico
- Sacar el jamón de la funda o envoltorio, para que el jamón “respire”.
- Una vez hemos sacado el jamón de la funda, debemos ubicarlo en un lugar fresco y seco, ya que, si no, se mantiene la superficie húmeda y al retener una parte del agua que se va evaporando y, puede dar lugar a la proliferación de los ácaros del jamón, también conocidos como piojillos.
- Cuando ya tenemos el jamón listo para disfrutar, hay que limpiar la zona que se va a consumir con un cuchillo para quitarle la grasa exterior más amarilla, así como la zona donde está el moho. Y cuando vayamos a cortar el jamón, que sea un cuchillo diferente al que usemos para limpiarlo para que el jamón no se contamine.
- Una vez listo para disfrutar, cuanto antes lo consumamos ¡mucho mejor!
- Para comenzar a consumirlo, es ideal seleccionar el lado del jamón que esté más duro porque es la que está mas curada y más óptima para consumir antes.
- Una vez abierto hay dos vertientes para su conservación: con un trapo encima o bien, con la grasa del propio jamón. Nosotros siempre recomendamos hacerlo con la grasa ya que hace que el corte esté hidratado y no se seque, ni se ponga duro y así evitar también la aparición del moho.
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