¿Qué es el síndrome de Estocolmo y por qué las víctimas no pueden denunciar a sus agresores?

Un hombre ha sido detenido en Hospitalet de Llobregat, en Barcelona, acusado de intentar acabar con la vida de su pareja tras una agresión que se habría producido en presencia de los dos hijos menores de la mujer. La víctima lo había denunciado hasta en cuatro ocasiones por violencia de género, sin embargo todas habían sido retiradas por la misma mujer.

Los hechos ocurrieron en la madrugada del pasado domingo, 25 de junio, en torno a las tres de la madrugada en el domicilio que ambos compartían junto a sus dos hijos. A esa hora el hombre intentó acabar con la vida de ella a profiriéndole varias cuchilladas. La mujer se encuentra actualmente ingresada en el hospital con heridas graves en la zona del tórax y las piernas aunque no se teme por su vida.

Tras los hechos los Mossos d’Esquadra pudieron identificar y detener al agresor de 34 años al que se le acusa de un delito de tentativa de homicidio. Está a la espera de pasar a disposición judicial.

El síndrome de Estocolmo

Se conoce como síndrome de Estocolmo, de forma general, a la situación que se crea cuando la víctima de un rapto se enamora de su captor. Este síndrome fue descrito por el psiquiatra Nils Bejerot en 1973, tras un atraco y secuestro en Estocolmo.

En él, Jan Erik Olsson entró en una sucursal bancaria con intención de robar y retuvo a cuatro personas durante seis días. Durante esos días una de las rehenes llegó a empatizar con el secuestrador, a pedir su liberación y a criticar con dureza la labor policial, fenómeno que fue estudiado posteriormente por este psiquiatra.

Violencia de género

En relación a la violencia de género se usa este término para hablar de esa dependencia que se crea entre la víctima y su agresor, que no solo le impide entender que está siendo maltratada sino que además se acaba responsabilizando y culpando de las agresiones que recibe.

En estos casos a la víctima le es imposible denunciar o, si lo hace, puede que acabe volviendo con su agresor o retirando la denuncia porque es una persona completamente anulada. Siente que sin él está peor que a su lado.

Qué se debe hacer

Ante estos casos las personas que forman parte del círculo cercano de la víctima tienden a frustrarse y, en muchas ocasiones, alejarse. Por eso los expertos señalan que lo más importante es permanecer al lado de la mujer que está siendo maltratada sin intentar convencerla de nada.

Es mejor, según los psicólogos, explicar la situación con calma y no obligarla a que haga nada que no pueda hacer. Es importante que en este supuesto también se le ofrezca a la víctima la ayuda de un profesional de la salud mental que la acompañe en este proceso.