Aparecen nuevas pistas que señalan a Óscar como culpable de la muerte de Esther López
Dos informes muestran que Óscar buscó en el GPS la curva en la que aparecería Esther 20 días después
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El Grupo de Apoyo Técnico y el Grupo de Lucha Contra el Cibercrimen han presentado dos extensos informes muy técnicos que demuestran que la versión de Óscar en su declaración no es real. A ellos ha tenido acceso Alfonso Egea, de El Programa de Ana Rosa (Telecinco), que los ha compartido en primicia.
Los informes han sido revisados durante una reunión con la jueza y el fiscal del caso en la que los investigadores han traducido los datos debido a la tecnicidad de los mismos.
Nuevas pistas
Lo que se desprende de estos informes es, por un lado, las búsquedas que hizo Óscar en su móvil los días cercanos a la desaparición de Esther y por otro, los posicionamientos del coche del investigado.
Respecto a los datos que arrojan las búsquedas de su móvil se sabe que los datos del historial del móvil de Óscar se borraron en torno al día 13 de enero, lo que podría ser un borrado intencionado. Aún así los investigadores han conseguido restablecerlos y han comprobado que el mismo día 13, unas horas después de desaparecer Esther, Óscar buscó desde el GPS de su móvil la curva en la que 20 días más tarde aparecería el cuerpo de la chica. Según la posición de su teléfono, esta búsqueda se llevó a cabo cuando él se encontraba en Valladolid.
Después de esto Óscar volvió a Traspinedo. En su versión inicial dijo que se había quedado todo el día en Valladolid pero la cambió después de que su pareja sentimental contara que el investigado había regresado a Traspinedo para limpiar la casa antes de que llegaran sus padres.
Según el posicionamiento del móvil, después de esto Óscar torna a Valladolid de nuevo y por la noche vuelve al pueblo, deja el móvil en su casa, que se mantiene inactivo durante unas dos horas y se desplaza hasta la curva que por la mañana había buscado desde su teléfono. Allí estuvo unos treinta minutos.
Como se supo en su momento, Óscar había borrado los datos del sistema operativo del coche, pero olvidó que el vehículo llevaba una SIM incorporada para llamadas de emergencia. Ha sido gracias a esta tarjeta que los investigadores han podido conocer cual fue la trayectoria de su coche el día de los hechos.
Cronología de lo sucedido
Respecto al posicionamiento de los móviles de Óscar y Esther hay datos que no concuerdan con la versión del investigado, ya que éste aseguró que había dejado a la chica sola en torno a las 03:00 de la madrugada y se había marchado a dormir a su casa.
Sin embargo, entre las 06:35 y las 08:55 ambos teléfonos estaban desactivados. A las 08:56 los dos dispositivos se activan (a la vez) y se ponen en movimiento, en la misma dirección.
Entre las 09:17 y las 11:00 el móvil de Esther se posiciona en una zona de Traspinedo muy cercana a la casa de Carolo, el otro amigo con el que tanto Óscar como Esther estuvieron antes de quedarse solos. Según contó Óscar, el dejó a Esther porque ella le dijo que se iba hacia la casa de Carolo.
Los investigadores creen que en ese momento la chica ya estaba muerta o en el estadio previo a su muerte y que alguien puso el teléfono cerca de la casa de Carolo para tratar de incriminarlo.
Esther aparecería en la cuneta en la que estuvo Óscar, un punto negro de accidentes de la localidad, unos 20 días después, junto a su bolso y su móvil que había sido minuciosamente limpiado porque no tenía, ni siquiera, las huellas de la víctima.
Cosas que no concuerdan
Una de las principales dudas es si el cuerpo de Esther permaneció allí durante los 20 días que estuvo desaparecida o alguien lo puso después. La Guardia Civil cree que se depositó con posterioridad porque en ninguna de las batidas lo vieron y estaba en una zona relativamente visible. Además la posición en la que estaba, con los brazos relajados hacia abajo, denotaban que alguien lo había colocado así.
Otra incógnita está en el tiempo que Óscar pasó en la curva el día 13 de enero. En esos treinta minutos se podría pensar que el investigado dejó el cadáver de la chica en la zona, pero eso no casaría con el hecho de que el chico lavó su coche unas horas antes, por la mañana. Lo lógico hubiera sido que lo hubiera hecho después para eliminar cualquier resto de ADN de la chica.
Y, por último, otra de las preguntas que se hacen quienes se encargan de la investigación es por qué Óscar borró los datos de la centralita de un coche de renting nuevo, como era el suyo.
Todas estas dudas pretenden resolverlas en una investigación que se estima que durará unos seis meses más pero que cada vez estrechan más el círculo y señalan de forma más contundente al principal sospechoso, Óscar S.
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