Los padres de Helena Jubany tendrán que anticipar el dinero de la última prueba de ADN

La familia de Helena Jubany, la bibliotecaria asesinada en diciembre de 2001 a la que encontraron en el edificio de sus amigos, ha tenido que anticipar el pago de la última prueba de ADN que la Universidad de Santiago de Compostela ha efectuado por orden del juzgado de Sabadell que instruye esta causa.

En esta prueba, con la que se intentará esclarecer quien fue el autor o autores de la muerte de la joven, se hará una comparativa conjunta de los perfiles genéticos de los investigados, Santiago Laiglesia y Xavi Jiménez, con el material biológico hallado en el jersey que vestía Jubany el día de los hechos.

Es un análisis más complejo que los llevados a cabo por parte de la Policía Nacional y el Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses hasta la fecha y que debe hacerse en el centro de investigación gallego. Hasta ahora los análisis practicados por el cuerpo policial y el instituto habían cotejado por separado los perfiles de los sospechosos con el material del jersey y en ambos casos el resultado fue negativo.

Por ese motivo, a petición de Benet Salellas, el abogado que ejerce la acusación particular en representación de la familia de Jubany, y en contra del criterio de la fiscalía, el juez de Sabadell ordenó practicar esta comparativa conjunta que podría arrojar resultados diferentes a los que se han obtenido hasta el momento.

Sin embargo, para poder llevar a cabo dicho examen la Consellería de Justicia se negaba a pagar los 605 euros que cuesta, por lo que la familia de la víctima ha decidido hacerse cargo del pago.

605 euros, subraya Joan Jubany, hermano de Helena, han salido del dinero "recogido gracias a las campañas de mecenazgo". Consultada al respecto por el programa de Crims, la Conselleria de Justícia ha investigado lo ocurrido y se ha comprometido a repararlo. Fuentes del departamento afirman que la negativa de Justícia se ha debido a un "error de procedimiento" y han asegurado que el compromiso de la Conselleria es devolver los 605 euros a la familia Jubany.

El juez abandona el caso

El juez Juan Díaz Villar, que se había mostrado comprometido con la tarea de agotar las posibilidades para averiguar el grado de implicación de los Laiglesia y Jiménez en el asesinato de Jubany, ha abandonado la plaza de Sabadell para marcharse a Badalona.

Díaz Villar era el sexto juez que instruía la causa de Jubany. Será, en consecuencia, un séptimo juez el responsable de notificar a las partes el resultado de las pruebas de ADN efectuadas en Galicia y, en función de su resultado, decidir hacia dónde prosigue la instrucción.