Así ha sido la investigación del asesinato de Peter en Mijas

En mayo de 2019 dos hombres británicos se desplazaron desde Manchester hasta Mijas, en Málaga, con un objetivo: matar a Peter A. Williamson, otro ciudadano del mismo origen, casado y con un hijo. El motivo del crimen se debía a la rivalidad entre dos bandas vinculadas al narcotráfico en la ciudad de Sanford, de donde eran los tres, investigados y víctima.

Las dos mismas bandas también operaban en Andalucía, concretamente en la zona de la Costa del Sol y hasta ahí se desplazaron para ejecutar a Williamson.

Casi cuatro años después, los dos acusados han quedado en libertad tras pagar una fianza de 20.000 euros y después de haber estado todo este tiempo en prisión provisional.

La investigación

Según el informe elaborado por la Guardia Civil tras la investigación, recogido por Caso Abierto, todo empezó el 11 de noviembre de 2019, cuando Edward (de 39 años) y Aaron (de 25) llegaron a Barcelona desde Reino Unido.

Ya en la ciudad condal Edward alquiló un Opel Corsa en la localidad de Villanueva y Geltrú con el que ambos pusieron rumbo a la costa malagueña. De camino pararon en Alicante e hicieron noche en un hotel.Durante un par de días visitaron varias poblaciones del Levante y el día 15, al borde de la medianoche, llegaron a Mijas.

Siempre según el relato del fiscal, aparcaron el coche en la avenida del Sol y se alojaron varios días en una vivienda ubicada en la urbanización Riviera de Sol, donde residía la víctima.

La Guardia Civil pudo conseguir imágenes de ambos tanto en el hotel de Alicante como de Aaron, solo, en un hotel de la capital y en el aeropuerto de Málaga

El escrito de acusación considera acreditado que esos días los dos estaban ultimando los preparativos para hacerse con el arma del crimen y después acabar con la vida de la víctima en Mijas.

El acecho sobre la víctima se intensificó a partir de la madrugada del día 20, algo que quedó constatado con las grabaciones de varias cámaras de seguridad que los vieron pasar por la zona en torno a las 03:50 horas mientras comprobaban qué medidas de seguridad tenía la vivienda de Peter.

El día de los hechos

El 21, el día del crimen, la investigación establece que ambos llegaron a las 14.43 horas a la avenida Polaris, cerca de un gimnasio en el que la víctima estaba en ese momento, ya que su Audi S5 estaba aparcado en las inmediaciones.

Esperaron a que saliera del establecimiento ( en torno a las 14.58 horas) y se dirigieron a la avenida del Sol para aparcar el vehículo. Aguardaron en las inmediacionesa que llegara la víctima con la información que les iban facilitando otras personas que aun no han podido ser identificadas.

Cuando Peter terminaba de aparcar junto a su casa, y mientras Edward esperaba en un coche que tampoco ha podido ser reconocido para facilitar una rápida huida, Aaron se acercó a su objetivo a pie por el lado derecho del coche y presuntamente le disparó numerosas veces a través de la ventanilla antes de volver con su compañero y huir.

Peter recibió ocho balazos del calibre 9 mm en tórax y extremidades, el más grave en el hemotórax derecho de la cavidad torácica que le provocó una muerte rápida. Los agentes nunca encontraron el arma del crimen.

La detención

En mayo de 2020, la Guardia Civil anunció la detención de los sospechosos. Uno de ellos se estuvo desplazando durante cinco meses por distintos países europeos y sudamericanos. Ya con el estado de alarma decretado, regresó a España y se instaló en una vivienda de una pedanía de Murcia utilizada para preparar envíos de marihuana a su país.

Los agentes intervinieron en el inmueble algo más de 20 kilos de esta sustancia. El segundo fue detenido en Reino Unido y enviado a prisión por otros delitos anteriores cometidos en su país, hecho que facilitó su posterior extradición a España.

Escrito de acusación

Ambos están acusados, según ha aclarado la Fiscalía, de asesinar a tiros a la víctima. Por ello ha pedido 20 años de prisión para cada uno de ellos, otros dos por tenencia ilícita de armas y una indemnización de 150.000 euros para la viuda y el hijo del fallecido.