Gestación subrogada en España: las claves del caso de Badajoz
La pareja que trataba de comprar un bebé había pagado 2000 euros a la madre gestante, de origen rumano.
Gestación subrogada: la técnica de reproducción asistida que ha hecho madre a Ana Obregón
Una tercera persona desconocida estuvo con Helena Jubany el día que la mataron
La Policía Nacional detuvo el pasado martes a cuatro personas por el intento de compra de un niño. Una pareja, con la ayuda de un familiar, quiso intercambiar 2.000 euros por el recién nacido de una mujer de Rumanía que acababa de dar a luz en el Hospital Comarcal de Don Benito-Villanueva (Badajoz).
A los cuatro detenidos se les atribuyen los delitos de suposición de parto, alteración de la paternidad, de suplantación de identidad y de falsedad documental, ya que la madre gestante llevaba consigo la identificación de la mujer que iba a comprar el bebé para hacerse pasar por ella.
En un comunicado emitido por la Policía, ésta insiste en que los cuatro detenidos están implicados en un intento de maternidad subrogada, una práctica que está prohibida en España.
Fue el personal del hospital quien avisó a la Policía de que una mujer que acababa de ser madre quería registrar a su bebé con unos datos que no concordaban con los que aparecían en su historial clínico. Comprobaron que la paciente tampoco había aportado documentación original en el momento de su ingreso, solamente una fotocopia de una tarjeta sanitaria a nombre de una mujer cuyo historial clínico no era compatible con su exploración física.
Con esta información, los agentes entrevistaron en el propio hospital al supuesto padre del niño. Tras numerosas incongruencias en sus declaraciones, realizaron una investigación que les permitió conocer que la madre del bebé había sido ingresada con los datos de su esposa.
Finalmente, él mismo reconoció a la Policía que la mujer que había ingresado no era su esposa y que habían pagado la cantidad de 2.000 euros en Rumanía para comprar al recién nacido.
Al parecer el trato se había cerrado tres meses antes en el país de origen de la madre gestante. El abogado de la pareja acusada de la compra del menor pide, en cambio, que dichas declaraciones sean consideradas nulas ya que él no estaba presente cuando se produjeron.
Intentaban ayudar
En declaraciones a los medios a las puertas de los juzgados de Don Benito, el abogado de la pareja ha afirmado que solo intentaban "ayudar" a una amiga que no tenía tarjeta sanitaria para ser atendida. Ha defendido así, que sus clientes no estaban cometiendo ningún delito de simulación de parto ni tampoco estaban queriendo alterar la paternidad como indicó la Policía.
Ha insistido en que "ha sido un parto en territorio español por una ciudadana rumana que no tenía Seguridad Social y ha usado la tarjeta sanitaria de una amiga".
El abogado también ha negado la colaboración del hermano del marido. Ha explicado que la joven que ha dado a luz ha venido a trabajar a España y que en breve lo hará su marido.
Libertad provisional
El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Don Benito decretó el miércoles, 30 de marzo, la libertad provisional para la pareja y para el familiar del marido.
La madre del recién nacido ha quedado en libertad un día más tarde ya que aun no había pasado a disposición judicial por causas ajenas al juzgado. Lo ha hecho después de que se le tomara declaración dentro de las 72 horas que puede permanecer retenida, según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Extremadura (TSJEx). En su declaración, la acusada, de solo 28 años, ha negado las acusaciones que caen sobre ella.
Como medidas cautelares el juez ha ordenado tanto a la pareja como a la madre biológica presentarse en el juzgado los días 1 y 15 de cada mes, así como la retirada del pasaporte y la prohibición de acercarse al menor a menos de 150 metros. El familiar del marido no tiene la obligación de comparecer.
Se ha acordado, de igual modo, que los Servicios Sociales de la Junta de Extremadura se hagan cargo del recién nacido. La instrucción sigue abierta y no se descarta que haya más personas investigadas.
Gestación subrogada en España
Tal y como define la Organización de las Naciones Unidas (ONU) la gestación subrogada se refiere a una “forma de práctica reproductiva de terceros en la que los futuros padres contratan a una madre sustituta para dar a luz a un bebé”.
Puesto que hay una falta de legislación en algunos países y tampoco es algo que sea legal en todas las naciones, este hecho puede dejar en situación de desprotección y vulnerabilidad a los menores gestados.
En España la gestación subrogada está prohibida y esto ya lo recogía la ley de 2006, aunque se ha ratificado con la ley de aborto de 2023. Tras la aprobación de la reforma de la ley del aborto, en España, además, está prohibido no solo el utilizar vientres de alquiler, sino también el publicitar cualquier forma de gestación subrogada (artículos 32 y 33).
La situación es diferente cuando el bebé nace en otro país y vuelve a España. En ese sentido, el Tribunal Supremo emitió una sentencia en 2022 por la que se establecía que la única vía posible para la regularización administrativa de un menor nacido por gestación subrogada en otro país donde sí esté permitida es la adopción y no la filiación (como si fuese su hijo biológico).
También te puede interesar