Qué va a pasar ahora que Daniel Sancho se ha declarado no culpable

Daniel Sancho ha tenido que comparecer hoy ante el juez que instruye su causa para que éste leyera los cargos que se le imputan. De todos ellos (asesinato con premeditación, sustracción de la documentación y desmembramiento y ocultación del cadáver), Sancho solo ha reconocido el último, penado en Tailandia con un año de cárcel.

La ley tailandesa prevé la pena de muerte para los casos de asesinato con premeditación pero establece la cadena perpetua o una larga condena si hay confesión y arrepentimiento.

De momento Daniel Sancho continúa con la estrategia de defensa que ya adelantaron sus abogados en España y con la que sostienen que el chef español no planeó el asesinato y que lo que adquirió en el supermercado fue material para cocinar.

Ahora será el juez quien, en los próximos días tome una decisión respecto a lo que el joven está argumentando.

Lo que puede pasar ahora

De esta manera ahora pueden ocurrir dos cosas: que el juez no crea la versión de Daniel Sancho y considere que hay suficientes indicios para atribuirles los tres delitos que tanto Fiscalía como la Policía le imputan o que, por el contrario, reconsidere la versión del chef español y ordene que se lleve a cabo una nueva investigación.

En caso de que el juez tome como suficientes las pruebas recabadas por la Policía y valore como positivo el informe de la Fiscalía lo que sucederá es que pondrá una fecha para la celebración del juicio. Esto sería en 3 ó 4 meses, por lo que a principios de 2024 Daniel Sancho podría conocer su condena.

Si, por el contrario, el juez considera que hay indicios para creer que Daniel Sancho no planeó acabar con Edwin Arrieta y que, por tanto, cometió un homicidio imprudente, ordenaría que se realizara una nueva investigación minuciosa del caso la cual no tendría un límite legal de 84 días como la vez anterior, sino que esta podría prolongarse hasta 6 años en los que Daniel Sancho podría estar esperando en prisión preventiva para ser juzgado.

Marcos García Montes, el abogado español de Daniel Sancho, ha explicado a los medios de comunicación que “ha ido todo muy bien” y que la estrategia estaba diseñada desde el principio. Esta ha consistido en reconocer que hubo una pelea y que el chef español actuó en legítima defensa, lo que desencadenó en que Sancho acabara con Arrieta sin haberlo planificado.

Puesto que no se encontraron todas las partes del cuerpo desmembrado de la víctima, nunca se pudo determinar cuál fue la causa exacta de su muerte y es a esto a lo que acoge la defensa para que no declaren culpable a Daniel Sancho de asesinato premeditado.

Además también ha contado García Montes que rechazaron al abogado de oficio anterior porque había hecho unas declaraciones a la prensa que eran parte de conversaciones privadas.