Caso Esther López: Óscar asegura que la Guardia Civil manipuló su coche

Óscar tuvo que volver a declarar el pasado 15 de diciembre después de que el informe de la Guardia Civil lo señale directamente por la muerte de Esther López.

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Un vehículo de la Guardia Civil pasa junto al lugar donde se encontró el cuerpo sin vida de Esther López
Un vehículo de la Guardia Civil pasa junto al lugar donde se encontró el cuerpo sin vida de Esther López / Nacho Gallego

El pasado 15 de diciembre Óscar S. tuvo que volver a declarar en los juzgados de Valladolid en relación a la muerte de Esther López el pasado enero de 2022 en la localidad vallisoletana de Traspinedo.

Esta declaración se produjo después de que la Guardia Civil entregara un informe de más de 400 páginas que lo señala directamente como autor de los hechos. Sin embargo el único investigado sigue declarándose inocente. Tan es así que a las preguntas de la jueza éste solo contestó que había cosas para las que no tenía explicación y que los golpes que presentaba su coche se los había hecho la Guardia Civil durante la inspección ocular.

Estos golpes coincidían, a la perfección, con las lesiones que presentaba el cuerpo de la víctima de 35 años. Sin embargo el investigado aseguró que el coche no tenía ningún desperfecto antes de que se lo llevaran para su estudio los agentes de la Benemérita. “Me quedé pálido” llegó a decir Óscar a la jueza cuando estaba explicando que vio que su coche tenía abolladuras.

Al informe de más de 400 páginas también se sumo otro estudio complementario de 50 páginas elaborado por la Unidad de Reconstrucción de Accidentes de la Guardia Civil que también ha sido fundamental para entender cómo se produjo, exactamente, el atropello de la víctima. En ambos informes no hay duda alguna de que quien cometió los hechos fue Óscar.

La jueza tendrá que determinar, en el juicio, si la muerte fue intencionada o no. Esa noche las condiciones de visibilidad eran óptimas gracias a la luna que había por lo que se sospecha que Óscar pudo agredir a Esther y luego planear el atropello yendo a por su coche y utilizándolo como arma. Además el ordenador del coche mostraría que en ese momento Óscar aceleró su vehículo.

En caso de que la jueza considere que hay suficientes pruebas para demostrar la premeditación, Óscar tendría que ser condenado por asesinato y no por homicidio.

Puesta en libertad

Tras la intervención del único investigado la jueza consideró dejarlo en libertad con medidas cautelares debido a que prevalece el derecho a la presunción de inocencia y la investigación ya ha llegado, prácticamente, a su fin. Por este motivo no existiría, según determina el auto de la jueza, riesgo de destrucción de pruebas ni de fuga, puesto que el investigado no se ha marchado del país en ningún momento desde que comenzó la instrucción.

Aunque entre las medidas cautelares impuestas esté la visita, semanalmente, en los juzgados y la retirada del pasaporte, Óscar S. tendrá libertad para moverse por el territorio nacional así como por países de la Unión Europea ya que se puede viajar con el documento de identidad, únicamente.

Tras su declaración la Fiscalía solicitó la entrada en prisión de Óscar, eludible con el pago de 20.000 euros en concepto de fianza, éste no tuvo que depositar tal cantidad finalmente.

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