Así ha sido la detención del maltratador de una mujer escondido entre mantas en Cáceres

La intervención de los vecinos ha sido clave para resolver la agresión de naturaleza machista a una mujer en Cáceres, ya que la vieron deambular por las calles, con una maleta y con su hijo en brazos, y con un claro aspecto de haber sido agredida. La Guardia Civil encontró a su agresor escondido debajo de unas mantas en la vivienda que ambos compartían en la ciudad.

Israel Bolaños, portavoz de la Guardia Civil en Cáceres ha explicado en El Programa de Ana Rosa como fue la captura del presunto maltratador. “Son las llamadas de los vecinos las que nos alertan de que han visto a una mujer deambulando”, comenta Bolaños.

La mujer presentaba marcas en la cara compatibles con una agresión. “De esta manera de forma inmediata se desplaza una patrulla de la Guardia Civil para intentar aclarar los hechos” continúa diciendo el portavoz. Sin embargo cuando los agentes llegaron la mujer ya había entrado en el domicilio familiar por lo que se pusieron a recabar información, consultando con los vecinos, sobre la situación de la presunta víctima.

Quienes la conocían coincidían en que la mujer ya había sido agredida en ocasiones anteriores por su actual pareja. Al conocer este dato los agentes se desplazaron hasta la casa de la víctima pero se encuentran con una falta de colaboración por parte de ella, que se niega a abrir la puerta.

Únicamente consiguen mantener una conversación a través de la ventana. “Fue una conversación difícil ya que la mujer es extranjera y no habla castellano”, ha seguido explicando Bolaños.

Ante las respuestas de la mujeres los guardias civiles no se quedaron tranquilos porque sospecharon que el agresor podía encontrarse junto a ella en el interior de la vivienda. Por eso en base al Protocolo Oficial de Víctimas de Violencia de Género, los agentes recaban todos los indicios que les permitiera solicitar un registro del inmueble ante la autoridad judicial, que les fue concedida al día siguiente.

Cuando los agentes entraron el domicilio de la víctima “lo primero que hicieron fue asegurar tanto a la mujer como al niño pequeño que vivía con ella”, ha explicado el portavoz.

Luego registraron todas las estancias de la casa “y cuando creían que no había nadie dentro abrieron ese armario que utilizaban a modo de ropero y tras retirar la ropa que había en él encontraron al supuesto agresor que en ese momento fue detenido”, ha concluido Bolaños. Con esto el portavoz ha señalado que se logró evitar una situación de mayor perjuicio para la víctima.

Cuatro casos en el fin de semana

Salou, Cáceres, Pamplona y Burgos. Estas han sido las ciudades en la que cuatro hombres han asesinado o agredido a sus parejas y exparejas en solo un fin de semana.

El último de los casos ya confirmado como violencia de género ha tenido lugar en Salou. Los Mossos recibieron una llamada desde un hotel y al llegar a la dirección indicada se encontraron el cuerpo sin vida de una mujer y a su lado, el de un hombre que había intentando herirse a sí mismo.El sujeto ha sido detenido y el caso está siendo investigando.

En Pamplona una mujer de 47 años ha sido asesinada a manos de su compañero sentimental después de que ambos compartieran el mismo negocio en la capital, el Bar Anayak. El local llevaba poco más de un mes abierto. El presunto agresor se entregó poco después de acabar con la vida de su mujer, que ha dejado a cuatro hijos huérfanos.

En Burgos una joven de 20 años ha sido hallada muerta en un escenario que parecía ser el de un suicidio. La autopsia, de hecho, determinó que habría muerto por ahorcamiento pero lo cierto es que su cuerpo estaba plagado de golpes.

Según ha trascendido la chica llamó al 112 pidiendo ayuda pero cuando el equipo de emergencias llegó la joven ya no tenía pulso. Su pareja, de 42 años, fue detenido pero ha sido puesto en libertad a pesar de que tiene antecedentes por maltrato a mujeres.

De confirmarse la naturaleza machista de los dos últimos asesinatos, serían 26 las mujeres muertas en España en 2023 a manos de sus parejas o exparejas.

El teléfono 016 atiende a todas las víctimas de violencia machista las 24 horas del día y en 52 idiomas diferentes, al igual que el correo 016-online@igualdad.gob.es. También se presta atención mediante WhatsApp a través del número 600000016 y los menores pueden dirigirse al teléfono de la Fundación ANAR 900 20 20 10.

Ninguno de los teléfonos deja rastro en las facturas aunque sí es necesario que se borre el registro de la llamada desde el móvil o el correo. Atienden a todas aquellas personas que crean que pueden estar sufriendo este tipo de violencia o que necesiten asesoramiento porque no están muy seguras de ello.