Declaran culpable al acusado del ‘Crimen del jacuzzi’ que drogó y ahogó a su novia
El Jurado ha declarado culpable a Eduardo Enrique E. Por drogar a su novia con MMDA y ahogarla en un jacuzzi en su casa de Menorca en el año 2018.
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El 18 de junio de 2018 Eduardo y Elisabeth, ambos pareja sentimental, se encontraban en su casa con una amiga que también vivía con ellos, cuando él decidió verter MMDA (cristal) en cantidades mortales en la copa de Elisabeth. Tras esto la víctima comenzó a sentirse mal, le dieron nauseas, vomitó y se desvaneció. Momento que aprovechó Eduardo para sumergirle la cabeza en el jacuzzi, lleno de agua, y dejar que se ahogara mientras estaba inconsciente.
La versión que este mantuvo durante el juicio, celebrado a finales de noviembre de 2022, fue la de que ambos se habían drogado y habían decidido darse un baño a oscuras que a él lo llevó a quedarse dormido. Cuando despertó, cuenta, se encontró a su pareja con la cabeza metida en el agua y sin signos de vida. Llamó a emergencias, que tardó 7 minutos en llegar al domicilio, y Eduardo ya se encontraba seco y vestido.
Como pruebas que desmontan la versión del acusado se encuentra una grabación de ocho doras desde el teléfono de la víctima en la que queda recogido cómo él dice “que se muera”. Según Eduardo se estaba refiriendo a la otra compañera con la que vivían y no lo decía en sentido literal.
El agresor ya había sido denunciado con anterioridad por malos tratos y se había pedido su extradición desde Venezuela, donde nació, por asesinar, presuntamente, a la que entonces era su pareja. Además, la hermana de Elisabeth, que justo estaba aterrizando en el Aeropuerto de Barajas para pasar unos días con ella cuando sucedieron los hechos, recibió un mensaje de la compañera de piso de ambos en el que le contaba lo que había sucedido y le pedía que no pisara la casa, porque podía correr peligro.
La hermana de Elisabeth acudió de inmediato a denunciar lo ocurrido a la Policía y justo en ese momento recibió una llamada de Eduardo que no se atrevió a descolgar. Quien sí lo hizo fue el policía que estaba con ella y que se hizo pasar por un amigo. Le pidió al agresor que le pasara con Elisabeth y éste contestó que no se encontraba bien, ocultándole que había fallecido.
Este policía también ha comparecido en el juicio en el que finalmente Eduardo Enrique E., ha sido declarado culpable de los hechos por unanimidad. La Fiscalía y el Govern balear han reiterado su petición para que se condene al acusado a la pena máxima, de 25 años de cárcel, mientras que la defensa ha solicitado la mínima aplicable. Las acusaciones también piden una indemnización de 150.000 euros para los padres de la fallecida.
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