El Caso del 'Petiso Orejudo': un niño asesino despiadado y sádico que mataba a otros niños

Asesinos en serie

El Petiso Orejudo
El Petiso Orejudo

Cayetano Santos Godino, conocido como el Petiso Orejudo, fue un asesino en serie argentino nacido en Buenos Aires el 31 de octubre de 1896. Su apodo se debe a su baja estatura y a sus grandes orejas. Aunque su nombre completo es menos conocido que su apodo, su historia es una de las más infames en la crónica criminal argentina.

Godino mostró signos de comportamiento violento desde una edad temprana. A los 9 años, ya había sido acusado de incendiar varios edificios. A medida que crecía, sus tendencias criminales se intensificaron y evolucionaron hacia actos más violentos.

Con apenas 9 años empezó una serie de asesinatos que conmocionaron a la sociedad argentina. Sus víctimas eran niños más pequeños que él, a quienes atacaba brutalmente. Godino no solo se limitaba a asesinar, sino que también cometía actos de sadismo, tortura y mutilación.

Fue detenido en 1912 y sometido a juicio. Durante el proceso, se revelaron detalles horribles sobre sus crímenes. Fue declarado culpable de varios asesinatos y condenado a cadena perpetua.

Con solo siete años de edad realizó su primer ataque. Así el Petiso Orejuso secuestró a un niño de dos años al que se llevó a un descampado y le golpeó. Poco tiempo después volvió a cometer el mismo ataque con similar modus operandi a un bebé de dieciocho meses. En sendos casos la intervención de la Policía evitó un trágico desenlace al ser descubierto en el momento de los ataques. El Petiso Orejudo atacó a dos pequeños más y también fue descubierto. Por todo ello fue enviado a un correccional. Saldría del mismo y su sed de sangre ya era imparable. De esta manera, recién salido ahorcó a Arturo Laurora, de 13 años. Tras esto le metió fuego a una niña de 5 años, que moriría a las dos semanas por la gravedad de las quemaduras.

El Petiso Orejudo
El Petiso Orejudo

La intervención de varios vecinos consiguiría evitar que llevara a cabo tres nuevos crímenes. en 1912 el Petiso asesinó al niño Gesualdo Giordano, de tres años, al que estranguló y después le hundió un clavo en la sien. La policía lo detuvo a las pocas horas. En la comisaría Godino confesó todos sus crímenes y fue enviado a la prisión de Ushuaia.

A lo largo de su vida en prisión, Godino continuó demostrando un comportamiento violento. Intentó escapar en varias ocasiones y agredió a otros reclusos y al personal penitenciario. Murió en prisión el 15 de noviembre de 1944 por una hemorragia.

El caso del Petiso Orejudo, sigue siendo objeto de estudio en psicología criminal y criminología, ya que plantea preguntas sobre la naturaleza del comportamiento criminal y la posibilidad de prever y abordar la violencia desde una edad temprana.

stats