Nuevos datos sobre el ataque de perros a Arancha: los animales también atacaron a sus padres

Arancha, la enfermera zamorana de 27 años que murió tras el ataque de una jauría de perros el pasado lunes, 23 de octubre, en la localidad de Roales del Pan, iba hablando con su madre por teléfono cuando vio a los canes dirigirse con agresividad hacia ella. Lo último que le dijo a esta fue: “¡Mamá, que vienen los perros!”. Tras esta alerta la comunicación se cortó y la madre de Arancha salió corriendo al camino en el que estaría su hija, a la que encontró ya sin vida, 15 minutos después.

Ahora ha trascendido que cuando sus padres llegaron al lugar de los hechos los perros también trataron de atacarlos a ellos. La madre fue capaz de abrirse paso entre los animales utilizando un palo.

Miguel Ángel Martín, abogado de la familia de la víctima, ha detallado que Arancha fue avisando a su madre conforme se iban acercando los canes hacia ella. Cuando la mujer llegó los perros trataron de atacarla pero se defendió con un palo. La mujer "llevaba un palo con el que pudo espantar a los animales", ha indicado el letrado.

Su marido se aproximaría inmediatamente después y, puesto que los perros seguían en el camino, también se abalanzaron hacia él. "Los perros se le tiraron a la furgoneta del padre que tuvo que espantarles también". El abogado ha contado que, parece ser que los agentes de la Guardia Civil vivieron esta misma escena, aunque esto último ha expuesto que no podía confirmarlo.

Estos hechos, que forman ya parte de la investigación, sirven para apuntalar la acusación que va a llevar a cabo la familia de Arancha para exigir responsabilidades al dueño de los perros. Este hombre está siendo investigado por homicidio imprudente y las pesquisas se centran ahora en averiguar en qué condiciones tenía a los animales y por qué actuaron así.

En este sentido el abogado de la familia ha explicado en Telecinco que los perros debían estar bajo el cuidado del pastor. “No puedes dejar unos animales tan peligrosos sueltos y sin orden alguno”, ha criticado.

El pastor, que no fue detenido pero sí conducido a dependencias policiales, se acogió a su derecho a no declarar y ahora se trata de averiguar si se le podría imputar un delito por homicidio imprudente. La familia de Arancha, por su parte, ha pedido vivir el duelo en la intimidad y que cualquier comunicación que se haga sea a través de su abogado.