"Mi hijo está encerrado en casa", la denuncia de una madre tras la agresión de un adulto a su hijo

El pasado 10 de noviembre un hombre de 38 años agredía a un menor en su urbanización de Estepona porque le molestó que estuvieran jugando a la pelota en las zonas comunes. Tras el puñetazo el niño quedó casi inconsciente, con heridas en la cara, en la boca y en la frente. Desde entonces arrastra secuelas físicas y psicológicas mientras su madre lucha porque les impongan medidas de protección a su hijo.

El agresor es vecino del mismo bloque y ha quedado en libertad tras haber sido acusado de un delito de lesiones leves y no tener ninguna orden de alejamiento. Días después de la agresión y según la versión de la madre de la víctimas, éste y su padre los estuvieron amenazando.

Declaración de la madre

En una entrevista que la madre ha concedido al programa Vamos a Ver, de Telecinco, esta ha explicado que hoy, 28 de noviembre, ha estado junto a su hijo en los juzgados para que un forense examinara al pequeño de nuevo.

El chico presenta secuelas psicológicas y desde que ocurrieron los hechos ha bajado su rendimiento en la escuela. La mujer también ha contado que ahora tendrán que esperar hasta enero, que tienen cita con el psiquiatra, para que éste elabore un informe con el que puedan pedir protección para el menor. Ella reclama que le pongan una orden de alejamiento inmediata y no entiende por qué hay que esperar tanto tiempo para que eso sea posible. “El niño no habla, se ha vuelto hermético e introvertido”, ha detallado.

Según cuenta, el alcalde de Estepona le ha dicho que no le puede ofrecer soluciones porque se trata de un tema relacionado con la Justicia y que en relación a poderle conceder una ayuda para que se trasladen de domicilio, esto es imposible.

El peritaje de este caso ha sido posible gracias a que un amigo suyo grabó la agresión. Si no hubieran tenido esta prueba es posible que el caso no se estuviera estudiando de nuevo.

La madre solicita ahora que se haga justicia y que se les ampare ya que el hombre vive en el mismo edificio y se mueve con libertad por las zonas comunes mientras que su hijo “está encerrado en casa”.