¿En qué consiste el acuerdo al que han llegado por el atropello mortal de la pequeña Leire?

Era 6 de julio de 2021. La pequeña Leire caminaba junto a su madre, de la mano, por Roquetas de Mar, un municipio almeriense. En el momento en el que ambas fueron a cruzar por un paso de peatones un vehículo pasó a toda velocidad y arrolló a la niña, que murió media hora después.

Quien conducía era F.M.S, un legionario de profesión que en el momento del atropello salió del vehículo visiblemente ebrio y no se acercó a auxiliar a la víctima. Tras dos años a la espera de que se celebrara el juicio por el caso, la familia y el acusado han llegado finalmente a un acuerdo.

Con anterioridad éste ya había tratado de acordar con la familia indemnizarlos con 70.000 euros para evitar ser juzgado, pero los padres de Leire rechazaron su propuesta. La Fiscalía solicitaba para él cuatro años de prisión, la acusación particular, ejercida por la familia, pedía cinco. La defensa, sin embargo, pedía solo dos años, lo que se traducía en la posibilidad de no tener que ir a prisión.

En declaraciones a los periodistas en la Ciudad de la Justicia de Almería, la tía de la menor, Déborah, ha considerado injusto que la conducta de este conductor pueda ser calificada como homicidio imprudente (hasta cuatro años de cárcel).

La tía de Leire ha censurado que, tras el atropello, el supuesto autor se bajara del coche "con un cubalibre en la mano", que llevara incluso una botella de ginebra en el asiento del copiloto y que no se acercara ni a socorrer debidamente a la víctima.

"Eso no es una imprudencia. Es una persona que ha decidido una serie de cosas que han desembocado en una desgracia y lo tiene que pagar, asumir lo que ha hecho", ha indicado Déborah, quien además ha considerado "inhumano" que no hubieran terminado de celebrar el funeral de Leire y el acusado ya estuviera "en la calle".

Por su parte, el abogado de la familia, Juan Manuel Medina, que ejerce la acusación particular, ha señalado que solo podía solicitar, como máximo, cinco años de cárcel, una pena que de acuerdo a la legislación aplicable considera "a todas luces insuficiente" para el resarcimiento que piden los padres.

Finalmente las partes han llegado a un acuerdo. El acusado tendrá que cumplir una condena de tres años de prisión así como la retirada del carnet de conducir y deberá indemnizar a la familia de la víctima mortal con 215.000 euros. F. M. S. ha pedido perdón a la familia de Leire tras llegar a un consenso. Estos, por su parte, han lamentado que no se haya hecho justicia y se hayan visto abocados a aceptar el acuerdo. Han asegurado, además, que van a seguir luchando para que nadie más tenga que pasar por lo que ellos han pasado y han pedido un endurecimiento de las penas por "violencia vial" ante el inicio del juicio que sienta en el banquillo al acusado.