Irritabilidad o cansancio, entre los efectos del cambio de hora en nuestra salud
El próximo domingo 30 de octubre volverán a cambiarse los relojes al nuevo horario de invierno, adelantándose una hora
¿Qué día de octubre es el cambio de hora?
¿Cuándo hay que cambiar la hora para volver al horario de invierno?
El cambio de hora sigue siendo objeto de debate a nivel europeo entre detractores y defensores de esta medida. Mientras que se asienta un horario definitivo a nivel nacional, el próximo domingo 30 de octubre volverán a cambiarse los relojes al nuevo horario de invierno. De esta forma, a las 03:00 horas de la madrugada serán de nuevo las 02:00 horas, produciéndose el cambio de la madrugada del sábado al domingo.
Con este nuevo cambio horario amanecerá más pronto, pero también anochecerá antes. No obstante, tenemos que tener en cuenta que aunque ganemos una hora más de sueño estos cambios horarios pueden tener efectos nocivos sobre nuestra salud, tal y como informa la página oficial de Sanitas.
Los efectos que tiene el cambio de hora en nuestra salud
Cabe destacar que los grupos más afectados por los cambios de horarios son los niños y las personas mayores. Existen diversos estudios que ratifican estas consecuencias para la salud. El primero de ellos tiene que ver con el aumento de la secreción de la hormona de la melatonina, encargada de regular los estados de vigilia y sueño y que dependen de la luz solar. De hecho, cuanta más luz menos melatonina produce nuestro organismo, por lo que la hormona actúa más tardíamente.
Por otro lado, los cambios de hora en el reloj no afectan a nuestros horarios personales, laborales y académicos que siguen siendo su horario rutinario. Esto quiere decir que nos levantamos una hora más tarde por lo que se rompe nuestra rutina de sueño. Todo ello produce mayor sensación de cansancio, fatiga e irritabilidad en una gran parte de la población, debido a que la melatonina se desregula y se produce un cambio en nuestros hábitos.
También existen otros tipos de efectos como somnolencia durante todo el día, falta de concentración, dificultades para dormir por la noche o disminución del rendimiento. No obstante, al mismo tiempo, nuestros cuerpos funcionan de forma muy inteligente y nuestro organismo se acostumbra a estas consecuencias horarias en un período aproximado de tres días. Este es el tiempo necesario para que consigamos regular los ritmos conocidos como circadianos.
Consejos para mitigar el desajuste horario
Del mismo modo que es inevitable el cambio de horario no así tiene que serlo sus efectos sobre nuestro organismo. Por ello, Sanitas recomienda a la población en general anticiparse al cambio de hora, incorporando la nueva rutina los días previos a esta modificación, yéndonos a la cama antes, por ejemplo. Asimismo, también es muy recomendable adaptar el horario de comidas para que no sintamos sensaciones de hambres o pesadez.
El deporte también se convierte en nuestro mejor aliado a la hora de mejorar nuestro ánimo así como reducir la actividad durante el fin de semana en el que se produce el cambio de hora. Otra buena recomendación es evitar dormir siesta durante los días previos y reducir el consumo de bebidas que contengan cafeína, teína, taurina o alcohol. Reducir el uso de los dispositivos electrónicos, así como de los medicamentos para dormir, también puede ayudarnos a conciliar de manera más efectiva el sueño con el cambio de hora y así evitar las consecuencias sobre nuestra salud.
No hay comentarios