La aldaba
Carlos Navarro Antolín
Turismo de narcolanchas en Sevilla
Desde que Rusia invadiera Ucrania hace ya una semana más de 600.000 ucranianos han salido del país y más de un millón han abandonado sus hogares para refugiarse de los ataques del ejército ruso. Las explosiones y el avance de los tanques hacia las principales ciudades del país han obligado a miles de personas a esconderse en un búnker subterráneo para sobrevivir. Incluso niños ingresados en un hospital infantil han tenido que cambiar sus camas por estas habitaciones sin luz ni ventanas cada vez que suenan las sirenas antiaéreas y hay peligro de ataque
'¿Qué haríamos en España en caso de producirse un caso como el de Ucrania?', se han preguntado muchos estos días. ¿Estaríamos preparados para vivir una situación parecida? España no dispone, ni mucho menos, de la orografía que hay en Ucrania, ni de la multitud de viviendas particulares y edificios de comunidad de vecinos adaptados para este tipo de situación. Eso sí, España sí dispone de algunos búnkers, tal y como podemos comprobar en este recorrido de la mano de El Viajero Fisgón.
Debajo del suelo que pisan en la fotografía superior el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se esconde un gigantesco búnker de más de siete mil metros cuadrados con tres pisos de profundidad y diseñado a prueba de bombas nucleares y ataques con armas químicas.
El de la Moncloa no es, sin embargo, el más grande de España. Este privilegio le pertenece a la base aérea militar de Torrejón de Ardoz, donde existe un búnker de 10.000 metros cuadrados, en el que podrían refugiarse hasta 600 personas.
El búnker con mejores vistas de España es el del Carmel, construido como como defensa antiaérea y lugar de culto de todos los turistas no ya para empaparse de parte de la historia de nuestro país sino para contemplar mágicos atardeceres y perspectiva de todos los monumentos que acoge la Ciudad Condal.
Trinchera preparada por el bando nacional en la Guerra Civil española en Colmenar del Arroyo (Madrid), siguiendo los modelos contemplados en la I Guerra Mundial.
La zona costera, junto al mar, también ha sido un lugar muy solicitado para construir búnkers, debido a su posición estratégica y de vigilancia respecto a los movimientos del enemigo. En el Mediterráneo se encuentra uno de los que mejor se conservan de España. Concretamente en la localidad alicantina de Altea. Se trata de un búnker republicano de la Guerra Civil Española en Cap Negret.
Otro de los búnkeres ubicados en la playa es el de Santa Susanna (Barcelona). Declarado Bien Cultural de Interés Local (BCIL), este fuerte, construido el 6 de octubre de 1938 para vigilar el territorio en la Guerra Civil, es de hormigón armado y está situado sobre una base de piedra.
Refugio antiaéreo construido en el año 1938 que fue descubierto en los últimos años en Villa del Río (Córdoba). Cuenta con 18 metros de longitud y 1,75 metros de ancho para dar cabida a tres accesos a su interior, en el que ahora se pretende construir un centro de interpretación de la Guerra Civil española.
Este inmenso refugio de 2.000 metros cuadrados, situado a 15 metros bajo tierra y capaz de resistir bombas de hasta 100 kilos, fue construido en el parque del Capricho (Madrid) alrededor de 1937.
Otro de los búnker destacados en Andalucía se encuentra en la playa de Los Muertos (Cabo de Gata, Almería). Se encuentra semienterrado y próximo a los acantilados. Aún hoy es símbolo de la resistencia que ejerció dicha zona hasta ser finalmente ocupada en la Guerra Civil.
Por último, El Viajero Fisgón destaca el búnker de Santa Úrsula (Tenerife). Construido por Franco en 1941 en el contexto de la II Guerra Mundial, aunque España estaba oficialmente fuera del conflicto, es lugar de visita por parte de algunos turistas.
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