La ventana
Luis Carlos Peris
Reventa y colas para la traca final
La cerveza es una de las bebidas más consumidas en el mundo. Con la llegada del calor y el verano su consumo se dispara, esto se debe a la celebración de festivales, barbacoas, excursiones, visitas a la playa, etc. Todo ello invita a llevar tu cerveza para disfrutarla en compañía de tus amigos o seres queridos.
Aunque es una de las bebidas más consumidas, la mejor forma de beberla es bien fresquita, ya que caliente es, en muchas ocasiones, imbebible y si está demasiado fría puede perder ciertas propiedades que hacen que su sabor no sea igual. Además con la llegada del calor lo que apetece es una bebida bien fría que nos pueda refrescar.
Hay que tener cuidado cuando metemos la cerveza en el congelador, ya que el líquido del interior se puede congelar y cuando se descongela la cerveza no sabe igual. La temperatura ideal de esta dependerá del tipo de cerveza que estemos consumiendo. Hay quien dice que se debe tomar por debajo de los 3ºC, aunque lo que sí es cierto que la mayoría deben tomarse por encima de esta temperatura y nunca por encima de los 13ºC. A continuación, unos trucos para que tu cerveza quede a la temperatura perfecta y puedas disfrutarla en la mejor compañía.
Esta es la evolución científica del método tradicional de meter los botellines de cerveza en un barreño con hielo. Si en lugar de hacerlo solamente con hielo añadimos agua y sal, la sal baja la temperatura en la que el agua y el hielo se mezclan, haciendo que los hielos se comiencen a derretir. Esto hace que el agua esté a más baja temperatura, transmitiendo rápidamente esa bajada de temperatura a la bebida que se quedará perfecta para beber en aproximadamente 15 minutos.
Si queréis acelerar aún más este proceso, podéis hacerlo metiendo en el congelador el barreño con el agua, la sal, los hielos y las cervezas pero apenas se notará la diferencia.
Lo habitual cuando no tenemos cerveza fría es meterla corriendo a la nevera o, si vamos apurados, meter las botellas directamente al congelador. En un estudio científico se trató de enfriar tres botellas de cervezas con tres métodos diferentes:
Curiosamente la tercera botella baja de 22 a 15ºC de temperatura en solo 15 minutos.
Quizás hayáis visto alguna vez usar los sprays para enfriar rápidamente algunos productos. Existen vídeos de chef y pasteleros utilizando esta técnica. Básicamente consiste en poner boca abajo los sprays de aire comprimido que se suelen usar para "soplar" en cámaras de fotos y objetivos, o para limpiar los ordenadores o teclados.
Al ponerlos boca abajo no sale el contenido sino el gas propelente a presión que suele estar a una temperatura bajo cero. Dirigiendo el chorro de gas sobre las botellas de cerveza estas se enfrían casi inmediatamente, pudiendo llegar incluso a congelarse en minutos.
Este truco puede enfriar un botellín de cerveza en dos minutos, el único inconveniente es que está técnica solo se puede utilizar en pequeñas cantidades.
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