El CGPJ investiga a un juez por insultar a una víctima de violencia de género
El magistrado Francisco Javier Martínez Derqui, de San Fernando, se refirió a la mujer como “bicho” e “hija de puta” mientras era grabado sin saberlo después de la celeberación de un juicio
El Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) va a abrir diligencias informativas al titular del Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 7 de Madrid, Francisco Javier Martínez Derqui, a raíz de la queja presentada por una mujer víctima de violencia de género a la que se refirió tras una vista como un “bicho” e “hija puta”.
Francisco Javier Martínez Derqui, natural de San Fernando, estuvo durante varios años al frente del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 5 de Cádiz. Es hijo del coronel de Infantería de Marina Javier Martínez Pastor, recientemente fallecido y conocido por dejar encargada a su familia la publicación de una esquela en este medio en la que decía “Yo, Javier Martínez, he muerto”.
La mujer que ha presentado la queja ante el Poder Judicial es la modelo María Sanjuán, como adelantó ayer la Cadena Ser. La víctima alude en su escrito a la “falta de imparcialidad y animadversión” hacia ella, lo que le ha provocado una situación de “indefensión”. También ha pedido que se investigue al magistrado isleño por un delito de prevaricación.
En un comunicado, el CGPJ ha informado de que el Promotor de la Acción Disciplinaria acordó ayer mismo incoar una diligencia informativa a Martínez Derqui a partir de la queja formulada por la víctima en relación con las manifestaciones del magistrado tras la celebración de una vista y que quedaron reflejadas en la grabación que se entrega a las partes.
“Como es habitual tras la incoación de diligencias informativas, el Promotor dará traslado al magistrado de la queja y le solicitará que remita un informe de alegaciones”, han explicado desde el máximo órgano de gobierno de los jueces.
Este juez es el encargado de instruir los procedimientos civiles y penales derivados del divorcio y de varias denuncias presentadas por la víctima por malos tratos psicológicos, por amenazas y coacciones contra su ex marido, Josué Reyzábal.
Los hechos
La queja de la víctima viene después de tener acceso a un vídeo oficial grabado por el juzgado de la sala donde el magistrado se refiere a ella como “bicho” e “hija puta”. También hace otros comentarios como “verás el disgusto que se va a llevar la María Sanjuan cuando vea que tiene que darle los hijos al padre” o “estará por la noche en el Sálvame poniéndome de vuelta y media”, en referencia a la modelo española.
El juez de San Fernando se defendió en la Cadena Ser explicando que se trata de “una conversación privada grabada indebidamente”, pero lo cierto es que su difusión ha generado reacciones adversas. El propio ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha afirmado que las manifestaciones de este juez llamando “bicho” e “hija puta” a una víctima de violencia machista le producen “una profunda tristeza y un poco de rabia interior”.
La Asociación de Mujeres Juristas pide jueces “libres de prejuicios”
La Asociación de Mujeres Juristas Themis ha urgido al Consejo General del Poder Judicial a que establezca unos criterios para fijar el perfil de los titulares de los Juzgados de Violencia sobre la Mujer para que estén “libres de prejuicios de género” y contribuyan a erradicar la violencia machista. La asociación hace este llamamiento después de que una víctima de esta lacra haya denunciado a un juez de Madrid que instruye su caso tras comprobar, en un vídeo grabado en la sala de vistas, que se burló de ella. En un comunicado, Themis expresa su “alarmante preocupación” por las manifestaciones de lo que considera “injusticia patriarcal” que se refleja en las sentencias y resoluciones judiciales que se han dado a conocer en los últimos días.
Define “injusticia patriarcal” como aquella que “aplica normas y procedimientos, aparentemente neutrales y racionales, de forma que los resultados son contundentes manifestaciones machistas, llenas de prejuicios de género y de trato vejatorios hacia todas las mujeres, dejándoles en una absoluta indefensión”. Opina que existe “una responsabilidad” por parte del CGPJ en los asesinatos de violencia de género, porque los operadores jurídicos “están permanentemente cuestionando el testimonio de las víctimas”.
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