El Sevilla rompe relaciones con el Betis: "Han buscado deliberadamente el daño a nuestro club"

El Sevilla ha comunicado oficialmente que rompe relaciones con el Betis a raíz de la denuncia del club de Heliópolis que provocó que tres de sus jugadores fueran suspendidos en el partido ante el Celta de Vigo de la última jornada de Liga disputada hasta el momento

El club de Nervión entiende que "el comportamiento de los dirigentes del Real Betis Balompié denunciando la celebración de los jugadores sevillistas y haciéndolo además ante los organismos federativos y no ante la Comisión Antiviolencia rompe un importante código y sienta un peligroso precedente, ya que busca castigos deportivos a través de hechos no deportivos."

Ante esta actuación, los dirigentes sevillistas consideran que "los hechos denunciados por los dirigentes del Real Betis Balompié están en el contexto de una celebración de un partido de la máxima rivalidad, en campo propio, y sin objeto ofensivo ninguno, y no entiende que puedan ser interpretados como generadores de violencia. Sorprende que el club verdiblanco no entienda estos sucesos en el marco de la rivalidad y una sana deportividad sevillana. Y sorprende igualmente la decisión de los Comités Federativos sancionando deportivamente estos hechos, instaurando un peligroso precedente en todo el fútbol español."

Por su parte el club nervionense señala que ha dado sobradas muestras de tener altura de miras en casos similares, como cuando jugadores o incluso directivos del Real Betis Balompié se mofaron públicamente de jugadores del Sevilla FC, entendiendo que ciertos excesos e incluso ofensas debían quedarse en el contexto de las celebraciones, por más que fueran muestras de falta de educación y decoro.

Según el comunicado, "los dirigentes del Real Betis Balompié no han estado a la altura de las circunstancias, de la institución a la que representan ni de su afición, que ha sabido interpretar mucho mejor la situación que nos ocupa; institución y afición a las que el Sevilla FC muestra, como siempre, su total respeto."

Decepción sevillista

El Sevilla FC entiendía pasados y olvidados este tipo de comportamientos y de reacciones de dirigentes del Real Betis Balompié, más propias de otras épocas que de la actual, momento en el que entre ambas entidades reinaba la cordialidad y ha podido constatar que entiende de forma muy diferente las relaciones entre ambos clubes, que debieran ser de cordialidad y respeto dentro del sano marco de nuestra rivalidad deportiva. Marco que el Real Betis Balompié ha decidido transgredir de forma decepcionante para buscar beneficios deportivos más allá de los terrenos de juego.

Por todo esto el Sevilla señala que ha decidido "cortar las relaciones con el Real Betis Balompié, pues no entendemos que tales relaciones puedan seguir vigentes cuando los dirigentes de la entidad verdiblanca han buscado deliberada y conscientemente el daño de nuestro club. Ese, y no otro, hacer daño y perjudicar deportivamente al Sevilla FC, era el objeto de denunciar comportamientos extradeportivos ante tribunales de competición. Consecuencias que bien conocían en la entidad verdiblanca.

El Sevilla FC, por último, quiere reiterar su decepción por la inapropiada actitud de los dirigentes del Real Betis, no ya para con otro club, sino sobre todo para con el Sevilla FC. Y también su decepción con las decisiones de los comités federativos, decisiones que, además, aunque a posteriori y fuera del plazo de la sanción, han sido suspendidas cautelarmente por la justicia ordinaria.

La bandera 'anti Betis' en el derbi

Los hechos denunciados por el Betis y que acarrearon la sanción a los tres jugadores del Sevilla tuvieron lugar durante la celebración sevillista tras su victoria en el último derbi. Isaac Romero, Juanlu Sánchez y José Ángel Carmona exhibieron una bandera en la que se mostraba la silueta del escudo del Betis tachado. Un gesto con lo que celebraron junto al Gol Norte del Ramón Sánchez-Pizjuán tras la euforia del triunfo, todos ellos después de ganar su primer derbi con el primer equipo.

Tras los hechos, el Betis denunció al Sevilla por incitar al odio por la bandera mostrada, y la sentencia del Comité Disciplinario se emitió justo antes del encuentro entre el Sevilla y el Celta de Vigo. Un partido que tenía un significado muy especial para los tres canteranos blanquirrojos, Isaac Romero, José Ángel Carmona y Juanlu Sánchez, al ser la despedida de Jesús Navas en el estadio Ramón Sánchez-Pizjuán.

El Sevilla expresó entonces a través de un comunicado, su rechazo sobre la denuncia del Betis y la sanción, anunciando que habían agotado todas las vías administrativas de recursos ante el Comité de Competición, de Apelación y el TAD, y acudió a la justicia ordinaria para frenar la sanción, pero los plazos dejados por las decisiones de los órganos federativos imposibilitaban que la justicia ordinaria resolviese para frenar la suspensión, pese a los intentos del club sevillista.

El Sevilla anunciaba entonces que "el procedimiento sentaba un peligroso precedente en cuanto al comportamiento de los jugadores de ambos clubes", y que sería tenido en cuenta por la entidad sevillista en las relaciones entre ambos clubes, que de alteradas han pasado a estar rotas.