La sanción a los canteranos del Sevilla abre una importante brecha con el Betis
El club asegura que responderá igual que su archirrival ante gestos o expresiones similares en próximos derbis
El Sevilla espera que responda el Juzgado de Primera Instancia de lo Contencioso Administrativo antes de que se juegue el partido ante el Celta: es difícil que resuelva en plazo
El Comité de Disciplina sanciona a Isaac Romero, Carmona y Juanlu por el escudo ‘anti Betis’
El Sevilla envió a primera hora de la tarde de ayer una petición al Juzgado de Primera Instancia de lo Contencioso Administrativo para intentar frenar la sanción impuesta por el Comité de Disciplina (tras agotar las vías administrativas de Apelación y TAD) a Carmona, Juanlu e Isaac por mostrar una bandera con el escudo del Betis tachado en la celebración posterior al triunfo en el último derbi. Una bandera lanzada desde Gol Norte que los jugadores cogieron y exhibieron.
El club ve inviable que la justicia ordinaria responda en tiempo y forma. Aun así han sido los tres incluidos en la convocatoria. En su comunicado, el Sevilla explica que "ha agotado todas las vías administrativas de recursos ante el Comité de Competición, de Apelación y el TAD, y ha acudido a la justicia ordinaria para frenar la sanción, pero los plazos dejados por las decisiones de los órganos federativos han imposibilitado que la justicia ordinaria haya resuelto por el momento para así frenar la suspensión, pese a los intentos del club sevillista. En todo caso, el club seguirá aguardando la resolución hasta la hora del partido".
El comunicado termina con una invectiva hacia el Betis por denunciar ante Competición los hechos. Un gesto que aseguran en Nervión que tendrá respuesta similar ante gestos iguales en próximos enfrentamientos de rivalidad: las relaciones se han estropeado con este asunto y a ver cómo termina la cosa.
Según la nota oficial, "el Sevilla FC quiere hacer público su descontento y decepción por el procedimiento de denuncia del Real Betis de unos hechos que se circunscriben a una sana rivalidad deportiva, ya que en casos precedentes el Sevilla FC entendió el contexto en el que se produjeron hechos similares o más graves y no elevó los casos a denuncia ni quiso sacar réditos deportivos a través de hechos no deportivos".
Por ello, asegura que "este procedimiento sienta un peligroso precedente en cuanto al comportamiento de los jugadores de ambos clubes se refiere, y que será tenido en cuenta por la entidad sevillista en las relaciones entre ambos clubes, que se han visto alteradas".
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