La nueva era de austeridad del Sevilla alza el telón

A la chita callando y aguantando el chaparrón de críticas, el Sevilla ha alzado como el que no quiere la cosa el telón de la nueva era de austeridad. En una misma jornada, el club anunció las condiciones de la pretemporada del equipo de Xavi García Pimienta y se confirmó algo que era vox populi: la pretemporada será en la ciudad deportiva. Al menos, la primera parte, coincidiendo casi con la canícula, el periodo de más calor en el Valle del Guadalquivir que va tradicionalmente del 15 de julio al 15 de agosto.

La Liga comenzará a mediados de agosto, con la festividad de la Asunción, y más de un mes antes empezará su trabajo el Sevilla... al calor de Sevilla. Esta noticia y las relativas a los movimientos en la cantera confirman la inauguración de la economía de guerra en Nervión.

La pretemporada... en Sevilla

El club, lógicamente, lo envuelve de cierta dignidad. “La primera parte de la pretemporada se desarrollará en las instalaciones de la ciudad deportiva José Ramón Cisneros Palacios, aprovechando las comodidades de la nueva residencia e instalaciones exclusivas del primer equipo”, anunció ayer la web oficial del equipo. “En los próximos días se anunciarán los detalles de una gira internacional y de otros amistosos fuera de nuestras fronteras”, añadía para no asustar en exceso a los que quieran ver la botella medio vacía o totalmente vacía. En realidad, tiene su razón de ser.

Las instalaciones fueron inauguradas el 2 de mayo, tras una inversión de unos 10 millones de euros, y es hora de aprovechar esa especie de hotel con un completísimo muestrario de instalaciones, centro médico, salón comedor, 40 habitaciones, gimnasio, aparcamiento propio... Un hotel de lujo con tres campos de entrenamiento.

Pero no deja de ser otra noticia, que se sucede a otras ante estos tiempos en los que el comité de dirección blanquirrojo debe enjugar el déficit de un ejercicio que se cerrará sin los ingresos presupuestados de competiciones europeas. El paupérrimo paso por la Champions, colista con sólo dos empates, contribuyó a esas penurias. Y esto se suma a los tres ejercicios defiticitarios anteriores, que ya acumulaban unos 80 millones de euros en negativo.

Una barbaridad, por el tremendo desequilibrio en las últimas temporadas entre el elevado coste y el rendimiento de una plantilla que no fue capaz de pasar de octavos de Champions en esos mismos años en los que el presupuesto sí incluía, de forma más que temeraria, los ingresos por llegar a cuartos. Un error tan flagrante como el de potenciar la plantilla en enero de 2022 –Martial y Tecatito Corona– para intentar luchar por la Liga, esa quimera que ahora quema en las arcas tanto como la vorágine de despidos de cinco entrenadores en los últimos dos años.

El giro a la cantera en la plantilla y el 'staff'

Hasta los movimientos de mercado son señales de esta nueva realidad espartana que ya vive el Sevilla. El club está a la espera de que se produzca una oferta en firme por En-Nesyri. Mientras tanto, avanza en otras operaciones menores relacionadas con la cantera.

El miércoles anunció los seis canteranos que, como mínimo, empezarán la pretemporada. Uno de ellos, Alberto Flores, tras firmar su renovación hasta 2027, aunque todavía no es oficial. Otra renovación pendiente es la de Ramón Martínez, que ha hecho una gran campaña en el Sevilla Atlético. Las partes están en plena negociación porque el central debe formar también la hornada de cantera.

Incluso el movimiento de piezas en la dirección deportiva pone el acento en esa mirada interior para paliar las necesidades económicas. Dos hombres que ya trabajaban en la cantera, Francisco y Álvaro Jurado, ascienden en esta escalada de promociones de la casa. Es la nueva línea editorial de austeridad. La nueva era del Sevilla.