Ni físico, ni solidez, ni orden en el plan de Lopetegui

El partido del Sevilla FC | Análisis

El entrenador yerra uniendo las pesadas piernas de Banega a las del Mudo y orillando a Ocampos con los sucesivos retoques

El argentino Lucas Ocampos trata de marcharse, sin éxito, de Javi López.
El argentino Lucas Ocampos trata de marcharse, sin éxito, de Javi López. / Antonio Pizarro

Cuando el Sevilla lucía palmito en la azotea de la Liga, emergió como un equipo sólido, con un generoso despliegue físico y un escrupuloso orden táctico, virtudes que solían imponerse a su defecto principal, la falta de gol, de rematadores y hasta de remate. Los sevillistas optimistas esperaban que Lopetegui, y también Monchi, subsanaran esa deficiencia, no menor, para terminar de apuntalar el nuevo proyecto; pero los sevillistas pesimistas, que los hay, se temían que en espera del gol el bloque empezara a ablandarse. Y es lo que está pasando.

Departamento de Infografía
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El pregonado nivel físico de la plantilla no es tal. Es una patraña con la que los entrenadores rivales embaucan al Sevilla y de paso espolean a sus jugadores. A saber: dos laterales escuálidos y nada avezados en cuestiones defensivas, Jesús Navas y sobre todo Reguilón; un medio centro y un mediapunta, Banega y Mudo Vázquez, a los que se le suben los caracoles por las medias; y una pieza clave en la solidez, Fernando, que da muestras de desgaste.

El equipo se fue abriendo en canal por el medio (cómo llega la jugada del VAR, si no) y, con la derrota en el plano físico y la pérdida de la solidez, también se fue desordenando con los laberintos tácticos de Lopetegui.

Defensa

Tener una pieza de la endeblez que hoy muestra Sergio Reguilón en el costado izquierdo desmonta toda pretensión de solidez. Su modo de pretender colarse por delante a Wu Lei y, tras un infantil forcejeo dejarle el camino expedito hacia Vaclík fue el colofón a su desastroso partido. Antes, fue un manojo de nervios que tampoco ayudó a calmar Diego Carlos con sus imprecisas aperturas a la banda izquierda.

Con todo, la clave de que el partido se volcara hacia el área sevillista tras los primeros 20 minutos fue la creciente anchura de la parcela que se iba abriendo por delante de la defensa. A Banega y Franco Vázquez se le hubieran podido subir los caracoles por las medias. Pero no es temporada aún para que los preciados moluscos saquen sus cuernos al sol.

Ataque

Ocampos y Suso fueron los únicos que inspiraron peligro de salida. El gaditano parte de la derecha para tirar de visión periférica y ejecutar con su talento y la precisión de su zurda: ora serpentear hasta la corona del área para el último pase, ora el pase largo, como en el 1-0. Ocampos, al que Cabrera le hizo un penalti que pasó desapercibido para ambos árbitros, fue perdiendo trascendencia cuando Lopetegui lo metió de carrilero izquierdo (al entrar Gudelj por Reguilón y cambiar a zaga de tres centrales) y cuando pasó luego a lateral siniestro, con la vuelta a la defensa de cuatro una vez entró De Jong por Banega y Gudelj se adelantó a la medular.

Virtudes

Suso ya es factor diferencial.

Talón de Aquiles

Lopetegui falló en el once y también en las sucesivas probaturas, todas abocadas al desorden.

Los jugadores del Sevilla, uno por uno

Vaclík Si el Sevilla se desnudó atrás otra vez, no fue por él.

Jesús Navas En su línea de ser mucho más insistente que acertado, tanto en la elección como en el golpeo.

Sergi Gómez Volvió a ser el más digno atrás, lo que igual no es buena noticia para el Sevilla.

Diego Carlos Poca sintonía con Reguilón en el inicio de las jugadas.

Reguilón Descolocado, tenso, blando en las disputas. E inocuo.

Banega No se esconde, vale. Tampoco tiene fácil hacerlo con su pesadísimo trote, que tanto desnuda la zona ancha.

Fernando Alarma: sus piernas muestran fatiga.

Suso Vital su clarividencia, pausa y calidad para evitar una derrota segura sin su concurso.

Mudo Vázquez Lastre pesado por su lentitud y sus pérdidas.

Ocampos Partió en la izquierda para irrumpir en la derecha por su instinto. Luego, de carrilero o lateral, perdió peso en el juego ofensivo.

En-Nesyri Sin espacios, baja.

Nolito Nada cambió.

Gudelj Tiros malogrados.

De Jong Jamás en el sitio.

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