Una fiesta con más de 12.000 sevillistas en el Sánchez-Pizjuán

El sevillismo ha respondido a la llemada del club y arropó al equipo de Julen Lopetegui en el último entrenamiento antes de recibir al Athletic, una sesión que el cuerpo técnico programó en el Ramón Sánchez-Pizjuán con la posibilidad de entrada de público en las gradas del estadio.

Más de 12.000 sevillistas disfrutaron en una mañana soleada en la que han estado presentes muchos niños, que, aprovechando las vacaciones navideñas, han podido ver en acción a sus ídolos y han sido protagonistas de varias sorpresas. Ha habido regalos, los profesionales han tirado balones a la grada y se ha podido vivir una fiesta sevillista en familia. La afición ha aclamado en especial a Jesús Navas y ha dado muchos ánimos también a De Jong.

El público casi ha llenado las gradas de Gol Norte y Fondo con aglomeración de aficionados en las puertas incluso desde una hora antes de que abrieran las mismas para el pertinente acceso, todo ello dentro de la campaña La magia que nos une, con actividades en los aledaños del estadio como la presencia del Cartero Real.

En lo puramente deportivo, Lopetegui ha podido contar con toda su plantilla a pleno rendimiento, incluido Nolito, ya recuperado de sus molestias.