La espera se eterniza

Sevilla/Ni sí, ni no, sino todo lo contrario. Jesús Navas no se subió en el avión rumbo a Londres, como era la intención del club y del propio jugador, después de una última reunión infructuosa que parecía definitiva pero que, según parece, tampoco lo es. El comité ejecutivo del club, con José Castro a la cabeza, recibió al palaciego y su entorno, léase su padre y una representante del grupo Bahía Internacional, a mediodía de ayer en las oficinas del Ramón Sánchez-Pizjuán. Allí las partes expusieron sus respectivas ideas respecto a la contratación del jugador. El Sevilla subió su última oferta de tres temporadas por encima de los cuatro millones de euros brutos anuales. Pero esto tampoco fue convincente.

"Hay que esperar", dijo escuetamente Jesús Navas al abandonar el estadio que lo encumbró poco más allá del mediodía. "Vamos a intentarlo", comentó lacónico José Castro antes de subir al avión que lo trasladó a Londres. Y así siguen las cosas. Ni ultimátum, ni ruptura de negociaciones, ni sí, ni no, ni nada. La espera se eterniza y parte de la afición sevillista incluso se toma ya a broma un culebrón que parecía que iba a ser un corto relato de amor estival y ya va para gran novela folletinesca. Al cierre de esta edición había aún alguna esperanza de que hubiera una última llamada que salvara el acuerdo, pero la esperanza habrá de ser trasladada al fin de semana.

Con respecto a Simon Kjaer, el Sevilla tuvo que subir su oferta inicial hasta los 12 millones de euros, pese a que desde Turquía se hablaba de que el acuerdo podría cerrarse por 10 millones. El Fenerbahçe recibió recientemente otra oferta del Milan y aprovechó esa puja para apretar más al club nervionense, que ya tenía muy avanzada la operación con el jugador, a quien había fijado como prioridad absoluta para reforzar el eje de la zaga. El internacional danés de 28 años viajará próximamente a Sevilla para rubricar su contratación por el club nervionense, pues el acuerdo está cerrado a falta de ser rematado, posiblemente el lunes.

Desde un principio, el comité ejecutivo del club dio el plácet a una importante inversión en el central, una petición expresa de la dirección deportiva para reforzar una parcela coja desde la marcha de Rami, traspasado por 6 millones al Olympique de Marsella. Con la llegada del danés el Sevilla completa el cupo de centrales: Pareja, Carriço, en el que ha puesto toda su confianza Berizzo, hasta el punto de que el club ya ha iniciado los trámites para renovarle su contrato -expiraba en 2018-, Lenglet y Kjaer, además de Mercado, en el doble papel de central y lateral derecho. En la dirección deportiva no han tenido duda en ningún momento sobre la continuidad de Carriço, por el que han llegado ofertas importantes, alguna de 5 millones de euros. Berizzo entiende que es un jugador aún joven (28 años), con experiencia y liderazgo, que con confianza es capaz de rendir a un alto nivel pese a sus problemas con las lesiones del curso pasado.

Sólo faltaría cubrir el puesto de lateral izquierdo, tras el intento estéril por Amavi, debido a que no pasó el reconocimiento médico. En este sentido, y tras la tentativa del carísimo Arana -en Brasil aseguran que el Corinthians rechazó una oferta de 12 millones de euros-, desde Argentina llega la información de que el Sevilla ha tanteado al lateral zurdo Nicolás Tagliafico, de Independiente de Avellaneda. Según Radio La Red,se trata de un simple sondeo, pero ya es una pista sobre que Óscar Arias está abriendo el espectro tras la tentativa frustrada por Arana. Tagliafico acaba de debutar con la albiceleste en la nueva era de Jorge Sampaoli. De hecho, fue una de las cinco sorpresas que presentó en su primera convocatoria, junto con Correa, lo cual es un indicativo sobre su calidad. ¿Habrá hoy solución al caso Jesús Navas?