NAVIDAD
Los Remedios estalla de ilusión con su Heraldo

El equipo que 'echó' a Mendilibar

Mendilibar se lamenta durante el Sevilla-Rayo de la pasada temporada. / Antonio Pizarro

Vuelve al Ramón Sánchez-Pizjuán el verdugo de José Luis Mendilibar. La afirmación es una media verdad. El Rayo Vallecano fue el último rival del Sevilla que entrenaba el vizcaíno, destituido al día siguiente de aquel empate (2-2). En-Nesyri propició ese raquítico punto con un gol en un córner postrero que parecía salvar al último entrenador que consiguió un gran logro en Nervión. El último que consiguió lo más difícil, la química entre equipo y afición, con partidos memorables frente al Manchester United y Juventus. 

Es una media verdad la proposición que encabeza este artículo porque el verdugo de Mendilibar, como todos saben, fue el comité de dirección del Sevilla, que entonces presidía aún José Castro, pero en el que tenían ya mucha fuerza José María del Nido Carrasco, que unos meses después se haría con la presidencia del club, y Víctor Orta. Ninguno de los tres tuvo una confianza tan sólida como la que disfruta actualmente Xavi García Pimienta, el entrenador elegido por el director deportivo para encargarle el proyecto de la regeneración del club.

Gracias a los reportajes que sacó Movistar Plus sobre LaLiga 23-24, la opinión pública sevillista conoció una reunión de los cuatro protagonistas susodichos en pretemporada. Mendilibar se reía mientras escuchaba las propuestas de Castro, Del Nido Carrasco y Orta. “Meternos en Champions pero con jugadores jóvenes”, dijo irónico, dejando caer que milagros como el de Budapest sólo se dan de vez en cuando. El director deportivo y algún peso pesado de la plantilla que estuvo en el banquillo Sevilla-Rayo tenían señalado a Mendilibar. Su renovación sin creer en él fue un error. Y el hombre que sugirió su nombre, Emilio de Dios, también sería despedido meses después.

El Rayo sólo fue un inconsciente mensajero con una misiva letal. Los dos partidos anteriores fueron un empate en Eindhoven –con fallos al alimón de Sergio Ramos y el árbitro– y una derrota en Barcelona (1-0) con autogol del camero. Lejos quedaba el trío de derrotas del inicio liguero. Lejos también cómo compitió el Sevilla con el Manchester City, hasta llevarlo a la prórroga y los penaltis en la Supercopa de Europa... Ay, aquel disparo de Gudelj al larguero. Ya daba igual todo, Mendilibar no era técnico para este Sevilla tan moderno.

No hay comentarios

Ver los Comentarios

También te puede interesar

Lo último