Un derbi para definir los caminos a seguir

Sevilla/Derbi número 107 en Primera División, 142 si se suman todos los disputados en las diferentes categorías nacionales, y tanto el Sevilla Fútbol Club como el Real Betis Balompié llegan con dudas y también con ilusiones a esta primera cita del curso que el calendario colocó esta vez más pronto de lo habitual en las campañas más recientes. Desde que los sorteos están dirigidos por los condicionantes impuestos por LaLiga solía disputarse casi siempre en noviembre, sea por casualidad o por lo que fuere, y esta vez la primera cita entre los máximos rivales sevillanos llega en los albores de octubre, con calor incluso, para que nada falte en el estadio Ramón Sánchez-Pizjuán, sede del envite.

Hay una circunstancia, antes que nada, que sólo tiene que ver con uno de los contendientes, pero que acapara en las horas previas toda la atención. Se trata del último derbi del futbolista que, si lo juega, será el que más veces los haya disputado a lo largo de toda la historia. Se despide de este tipo de citas Jesús Navas, que, en el caso de salir al césped para siquiera participar un minuto, superará a Joaquín como el hombre que ha estado presente en más ocasiones en partidos de la máxima rivalidad sevillana. 

Sería el derbi número 28 para el futbolista palaciego, que ya no se sabe bien si es extremo o lateral, pero que sí presenta, además, uno de los currículum más prestigiosos de todos los jugadores que se han movido por estas tierras de una u otra manera. Sólo Sergio Ramos lo ha superado, aunque el camero desarrolló la mayor parte de su carrera balompédica en el Real Madrid y no en alguno de los dos clubes sevillanos por más que su procedencia fuera de los campos de la carretera de Utrera. Jesús Navas, si juega, rompería el empate a 27 que tiene en estos momentos con su amigo Joaquín, ya retirado.

Problemas físico en la cadera

El palaciego tomará el mismo camino que el portuense en el próximo mes de diciembre, entre otras cosas porque sus problemas físicos ya le impiden incluso tener una vida normal por la artrosis en la cadera. Eso le otorga un plus de emotividad a este Sevilla-Betis en el estadio Ramón Sánchez-Pizjuán, aunque cuando eche a rodar el balón todo eso quedará en una anécdota más de las que rodean a este tipo de encuentros.

A partir de ahí decidirá el acierto de los protagonistas, ni siquiera tendrá mayor trascendencia la pelea durante la semana para huir del favoritismo que otorgan los datos en las horas previas. Ésa es una cuestión inherente a todos los derbis que se disputan en esta bendita ciudad llamada Sevilla. Tanto unos como otros no quieren el cartel con la palabra favorito como si prácticamente fuera una maldición.

Nada más lejos de la realidad. El que llega como favorito lo hace porque en la competición ha acumulado muchos más méritos que sus adversarios y por mucho que siempre se pueda dar un signo inesperado en la quiniela, como es normal en el fútbol, la mayoría de las veces suele salir ganador el que mejor plantilla tiene si las distancias son siderales entre unos y otros. O, al menos, todo acaba en empate, pero rara vez se producen sorpresas mayúsculas. Alguna hubo, claro que sí, esto es fútbol y la quiniela es muy difícil de acertar.

Ventaja de tres puntos para los béticos

Ocurre, sin embargo, que esta vez tampoco ha dado mucho tiempo para que las distancias sean siderales en la tabla clasificatoria. Sólo se han contabilizado ocho jornadas de lo que ahora denominan comercialmente LaLiga EA Sports y los verdiblancos llegan con tres puntos más en su casillero. Los hombres de Manuel Pellegrini acumulan 12 unidades gracias a sus tres triunfos y sus tres empates. Por el contrario, cayeron en dos ocasiones ante el Real Madrid y el Mallorca. Eso los sitúa en la octava plaza en estos momentos.

A las órdenes de Xavi García Pimienta por primera vez en estos derbis de la máxima rivalidad sevillana, los blancos llegan con 9 puntos, tres menos que sus adversarios, acumulados merced a sus dos triunfos, sus tres empates y sus tres derrotas frente al Villarreal, el Girona y el Alavés. Su lugar dentro de la máxima categoría es el decimotercero tras haber arrancado con muchas dudas acerca del potencial de una plantilla que ha ido dando pasos atrás en los últimos cursos para pasar de disputar la Liga de Campeones, incluso de conquistar la Liga Europa en 2023, a que muchos la sitúen dentro del paquete de equipos que pelea por evitar el descenso.

Eso dictamina la realidad de los datos objetivos, los puntos, de los dos equipos y ahora llega lo que tiene que ver con las sensaciones. El Sevilla transmite que está dando pasos adelante dentro de las dudas que existen por el nivel de los futbolistas que han puesto a disposición de García Pimienta. Las salidas de hombres importantes han sido suplidas por apuestas y habrá que ver el resultado de ellas conforme avancen las jornadas.

La derrota en Varsovia

En el caso de Pellegrini y los suyos, hasta ahora la línea ha sido irregular, pues ha alternado partidos de muchas ocasiones con otros más flojos. Lo Celso ha sustituido con creces la marcha de Fekir y ha marcado cinco goles que le han dado muchos puntos a este Betis, pero se echa en falta más ayuda para el argentino en algunas posiciones claves. Los béticos vienen de caer en la Liga Conferencia, la competición europea que disputan esta temporada, en su visita el pasado jueves al Legia de Varsovia.

En la teoría, al menos la teoría de momento, tienen mejores jugadores en su plantilla, entre otras cosas porque el límite salarial de ambos clubes se ha invertido y ahora la ventaja en ese sentido pertenece a los verdiblancos por la horrible gestión económica de los sevillistas.

Esta tarde habrá que dilucidar si en la práctica también el juego del Betis de Pellegrini es mejor o, por el contrario, el Sevilla del novato, en este tipo de encuentros, García Pimienta es capaz de darle la vuelta a la situación sobre el césped. Es el principal de los interrogantes en ese derbi número 107 de Primera División que será dirigido por el valenciano Juan Martínez Munuera, un árbitro con experiencia y que seguramente, como casi siempre, traerá malos recuerdos a los dos equipos por este o aquel partido en el que les haría alguna trastada. La cartelería indica que todo se dictaminará a partir de las 18:30 y ya veremos si el calor también se convierte en un factor importante. Las previsiones indican que estará la temperatura en torno a los 30 grados y que puede haber algunas nubes. Lo que sí es seguro es que esos grados se multiplicarán en las gradas para que el último derbi de Jesús Navas sea tan calentito como lo fueron todos los demás. Así son estos Sevilla-Betis y así lo seguirán siendo por siempre jamás.