La 'ausencia' activa de Peque e Isaac en el Lluís Companys

En el plan de García Pimienta en el Lluís Companys la figura de la pareja de delanteros formaba una parte primordial, pero Isaac y Peque ni le dieron salida al equipo con balón ni taparon lo que tenían que tapar. El inicio defensivo resultó estéril y todo el equipo lo pagó. En el 4-4-2 que opuso el Sevilla en la fase de construcción del rival al Barcelona le fue sumamente fácil superar líneas.

Los dos delanteros sevillistas, tremendamente frágil físicamente el catalán y muy perdido el lebrijano, no ejercieron una presión fuerte. No era ése el plan de García Pimienta, que ordenó más una presencia activa ante la salida de balón de los centrales del Barcelona y que se mantuvieran cerca de la línea de centrocampistas. Pero el resultado fue muy distinto, más bien fue una ausencia activa. Pau Cubarsí e Íñigo Martínez se convirtieron en los organizadores del juego del equipo de Flick y lanzadores en muchos casos de sus ataques. Peque e Isaac permitieron que los dos defensas culés fueran los jugadores del Barça con más acierto en pases, por encima de los 100 ambos, y con mucha diferencia, los jugadores con más posesión de su equipo, un 10,1% Cubarsí y hasta un 12,4% su compañero Íñigo Martínez. Los centrales tuvieron mucha más posesión que los medios centro, Pedri y Casadó, tercero y cuarto en porcentaje de balón con 7,8% y 5,7%, según datos de Whoscored.

Además, una vez que el Barça superaba esa primera linea de delanteros se encontraba en clara superioridad numérica, haciendo inútiles los esfuerzos de Ejuke y Lukébakio ayudando en defensa que además le costó la lesión al nigeriano. Por tanto, Gudelj y Agoumé se vieron superados en un 4 contra 2 al ser por esa zona por donde se movían Pedri, Casadó, Ansu Fati y Raphinha.

Isaac y Peque dejaron maniobrar con suma facilidad a los centrales del Barcelona, que tuvieron un acierto en pases por encima de la media y que jugaron entre ellos además con bastante comodidad. Cubarsí tuvo un 97% de pases completados (91 de 94) e Íñigo Martínez, un 92% (107 de 116). Tampoco lograron cerrar las líneas de pase con Pedri y Casadó.

Y no sólo los centrales tocaron en corto, sino que ordenaron el juego en largas distancias con pases de más de 40 metros, particularmente el defensa formado de La Masía, que enlazó dos veces con Lewandowski en pases largos y en tres con Raphinha.

García Pimienta buscaba tener salida con la velocidad de Ejuke y Lukébakio en las bandas y con Peque como enganche, pero el plan no salió. El ex jugador del Racing perdió todos los duelos y jamás le dio salida al equipo, al margen de aparecer como protagonista negativo en los dos primeros goles del Barcelona. Después sería sustituido y en la reestructuración con Lokonga en el medio y Agoumé algo más adelantado el Sevilla tampoco pudo frenar la capcidad de construcción de los dos centrales azulgrana.