Echando de menos a Rubi

El sueño de Martín Petón parece desvanecerse ante la fuerza de la evidencia. El milagro ya fue sacar al Huesca de ese pozo sin escala que es la Segunda B para, con el cuarto presupuesto más bajo de Segunda División, lograr un histórico ascenso, de la mano del entrenador Rubi, ahora en el pujante Espanyol. Al frente de la Fundación Alcoraz, el conocido representante y comentarista televisivo, a la sazón ex jugador del Huesca, dirigió la hazaña oscense como consejero delegado. Pero ya ha tenido que destituir a Leo Franco como entrenador. Lo hizo tras la derrota ante el Valladolid (1-0) y después de sólo ganar en el estreno liguero en Ipurua. El sueño fue un espejismo.

Petón aprovechó el parón liguero para que el almeriense Francisco, relevo de Leo Franco, tuviera tiempo para amoldar su idea al grupo. Pero la primera cita, en El Alcoraz además, fue otra derrota... ante el Espanyol de Rubi.

El presupuesto, gracias al milagro del ascenso, se multiplicó ostensiblemente: de los escasos 7 millones de euros de Segunda a unos 50 de Primera, más o menos lo que el Sevilla ingresó sólo por la Champions. Pero de momento, la mezcla de jugadores que han crecido en el Huesca, de los que quedan pocos, y de otros cedidos de distintos clubes no está dando resultados. Al Huesca le faltan piezas y calidad en las mismas.

Bajas de peso

Francisco, en su debut, probó con un clásico 4-4-2 con dos delanteros, situando arriba a Cucho junto a Longo, con Álex Gallar y Ávila en las bandas, por delante de los medios Musto y Moi Gómez. Pero se topó con el bien trabajado y profundo Espanyol de Rubi, que ya se puso 0-1 en la primera parte. En la segunda, reforzó la medular con Melero por Cucho, claves ambos en el ascenso, para un sistema de 4-2-3-1. Musto será baja en Nervión, con lo que tampoco podrá reforzar mucho por ahí el técnico del Huesca. Melero, capitán y líder el pasado curso, tampoco ha viajado por molestias físicas.

Sin balón

Aparece en Nervión el equipo que más goles encaja de toda la Primera División. El colista tiene un muy negativo balance goleador de 7-20. Francisco trata de dar equilibrio a un equipo que tiene problemas en las basculaciones laterales y que tampoco tiene una línea defensiva bien definida. Siempre con cuatro en el fondo, tampoco el repliegue de la segunda línea ha ayudado a mejorar la respuesta de un sistema defensivo deficitario, en el que se han alternado los metas Werner y Jovanovic. En el eje de la zaga, el polémico Ruben Semedo es un fijo junto a Jorge Pulido. YMiramón es un puntal en su tardío debut en Primera desde el lateral derecho. Y en el izquierdo puso a Akapo, a pie cambiado, ante la lesión de Luisinho.

Con balón

Los goles de Cucho ya no llegan en Primera División, donde también se hace corta la calidad de Melero en la medular o la ruptura de Gallar desde la derecha. Francisco apostó por Gallar y Ávila en los extremos y dos puntas: junto a Cucho, Longo, que no rompe.

Lo mejor

La energía nueva de Francisco.

Lo peor

Falta de calidad en general.