Informe técnico: La clásica seriedad y más colmillo

Sevilla - Osasuna

Lamela ofreció vías ofensivas al meterse hacia dentro para desequilibrar a un Osasuna que creó problemas con su presión adelantada: Bono lanzó más en largo y así cerró el partido

Así jugaron los futbolistas del Sevilla: Lamela abrió las vías cayendo al centro

El Sevilla es una roca aún más pétrea que Osasuna (2-0)

Esquema base y movimientos del once del Sevilla. / E. F. / Infografía

Un Sevilla solvente, serio como siempre y más pétreo que nunca, unió más colmillo a su imagen de equipo dominador de los tiempos y venció al mejor visitante de la Liga con nuevos recursos ofensivos. Sobre todo en la primera mitad, Lamela fue la solución al desequilibrar por el centro metiéndose en el espacio que dejaba Rakitic y despistando así las marcas del equipo de Jagoba Arrasate, que aún no había perdido a domicilio y se mostró incapaz de meterle de verdad el diente al sólido bloque de Julen Lopetegui. Éste tuvo un pequeño enfado con Bono en la primera mitad, por su decisión de sacar en largo cuando quizá en ese momento de presión alta de los rojillos quería el habitual manejo atrás del balón. Pero luego fue la solución para cerrar el partido:lanzamiento del meta a la referencia de Rafa Mir, Ocampos que anda más listo que Areso y Juan Pérez y 2-0.

El 1-0 fue otro recurso clásico del equipo de Lopetegui, que los rivales temen pero que no siempre frenan: saque de esquina perfecto de Rakitic, tras un buen ataque de éste apoyándose en Rafa Mir como pantalla en la frontal, y cabezazo inapelable de Diego Carlos.

Salvo unos 20 minutos, entre el 17 y 37, en el que el cabezazo al poste de Joan Jordán y se soltó de nuevo el juego ofensivo, el Sevilla siempre supo jugarle a Osasuna, que en esa fase sí que obturó la salida desde atrás con dos delanteros en vanguardia de su dibujo de 4-4-2. La presión alta de los rojillos tuvo por momentos atado a un Sevilla en el que no aparecían las soluciones y en el que los despejes cortos o imprecisos de los centrales impedían dar continuidad a la salida: hubo varias faltas y córneres en contra. Pero Lamela volvió a aparecer para desequilibrar cuando el Sevilla se deshizo de esa presión como ya hizo en la fase inicial, cuando hubo ocasiones de Delaney, Ocampos o una clarísima de Rafa Mir (17’).

Defensa

Montiel figuró en esta ocasión en el flanco derecho de la defensa titular, y fue el lateral que más subió, con Acuña más pendiente de un extremo pegador y buen centrador como Roberto Torres. Los centrales tardaron en cogerle el pulso a los centros de Osasuna, y tuvieron algunos errores en la salida que acularon al Sevilla. Pero Bono fue casi un espectador y sólo cabe contabilizar un cabezazo cruzado de Oier al principio y un disparo alto de Cote, tras un error de Koundé, al final. Nada más.

Ataque

Con Lamela, apoyando en las subidas de Rakitic, Joan Jordán y Montiel, Lopetegui encontró una nueva vía de distribución que desarmó al Osasouna de dentro hacia fuera. El flanco derecho fue en la primera parte una fuente de peligro. Por allí aparecía Montiel o Joan Jordán y hubo centros peligrosos que casi siempre cabecearon los sevillistas. Desde allí llegó también el 1-0 en córner de Rakitic perfecto.

La presión y los balones en largo también abrieron vías hacia la portería contraria:2-0 y ocasión de Ocampos para el 3-0.

Virtudes

Dominio de la situación siempre, incluso en la fase en que apretó Osasuna. Y más recursos arriba.

Talón de Aquiles

A algunos futbolistas, Rakitic o Lamela, se les hizo largo el partido.

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