Monchi, un año desde el regreso del hijo pródigo

El 17 de marzo de 2019 regresó Monchi al Sevilla tras dos años en Roma. El club lo recordó con un análisis sobre la trascendencia de su vuelta en la trayectoria del equipo. Era domingo a mediodía cuando el Sevilla anunció por todo lo alto el regreso de su hijo pródigo. "Monchi, vuelve el León", rezaba el titular de la información del club en la que se anunciaba la buena nueva.

Un año después el Sevilla de Lopetegui, en plena suspensión de la Liga por el coronavirus, carbura, pese a algunos vaivenes en un proyecto nuevo, y está tercero en la clasificación, dentro de los objetivos, salvando la eliminación en la Copa del Rey.

El propio Monchi recordaba la efeméride así en Twitter: "Gracias de corazón, pero no es un año... es una vida, la que os debo, la mía y la de mi gente".

El de San Fernando comenzaría su nueva etapa el 1 de abril de 2019, pero desde antes ya estaba de facto realizando gestiones, al tanto de todo. Pudo comprobar, por ejemplo, viendo los partidos in situ, la carencia de físico y de competitividad de una plantilla que sucumbió en el último tramo, que perdió con el Getafe a domicilio y con el Leganés en casa. La derrota ante los pepineros en Nervión, por un claro y rotundo 0-3 y con un fortísimo contraste en cómo se portó sobre el campo cada equipo marcó a Monchi, que se aprestó a su segunda gran revolución, tras la del verano de 2013.

Monchi, entre el verano de 2019 y enero de 2020, ha realizado 14 fichajes, de los cuales la mayoría están rindiendo y teniendo continuidad en el primer equipo, salvo la grave mancha de Rony Lopes, el futbolista más caro de la historia del club, debido a los 23 millones de euros en los que se pactó su traspaso, que apenas ha jugado un par de ratos en la Liga y alguno más en la endeble fase de grupos de la Europa League. Monchi aún tiene esperanzas en que el mediapunta brasileño y también espera que ceda poco a poco la virulencia del debate sobre De Jong.

La realidad de los números se empeña en constatar el éxito de la vuelta del hijo pródigo, pese a los problemas que tuvo para vender a futbolistas que no contaban. Demasiadas cesiones y poco rédito, con el dolor de tener que deshacerse de futbolistas contrastadísimos como Ben Yedder y Sarabia, cuyo fin en el Sevilla ya estaba anunciado. Con todo, el club quiere recordar lo mejor: con Monchi, el Sevilla es tercero y ha estado 26 de 27 jornadas en puestos europeos.