Sampaoli y el Sevilla en descenso, capítulo I

En marzo de 2020, Jorge Sampaoli desembarcó en un Olympique de Marsella en medio de un ambiente dantesco, casi literalmente. Los numerosos y viscerales ultras marselleses habían prendido fuego a la entrada de La CommanderieLa Commanderie, el centro deportivo del equipo, días antes, como protesta por la situación del club en general; tras varias derrotas consecutivas, sí, pero también por la crisis institucional. Había dimitido el 3 de febrero André Villas-Boas por su desencuentro con la dirección deportiva, que fichó a un futbolista sin su visto bueno en invierno. Ahí empezó la crisis que arregló el argentino.

El español Pablo Longoria dejó esa dirección deportiva para sustituir en la presidencia marsellesa a Jacques-Henri Eyraud y el director de cantera, el veterano marroquí Nasser Larguet, se tuvo que hacer cargo del primer equipo hasta el desembarco de Sampaoli. Pero el Marsella nunca se alejó de la zona noble y, por ejemplo, cuando dimitió Villas-Boas iba noveno. Ya quisiera el Sevilla actual.

Tras la aplaudida imagen en Dortmund, donde tuteó y pudo ganar al ogro Borussia, el equipo de Jorge Sampaoli afronta ahora una tarea más prosaica, pero incluso más vital. Debe mejorar en la Liga, en su visita a un inesperado rival directo, el Mallorca, su mejoría en la Champions... Y eso es un tipo de presión distinta a la que no están acostumbrados ni el entrenador ni el colectivo que tiene en sus manos, un Sevilla que lleva años viviendo en la zona alta de la Liga.

Coeficientes de puntos de Sampaoli

• Marsella: 1,88
• Atlético Mineiro: 1,90
• Santos: 1,90
• Sevilla: 1,75
• U. Chile: 2,05
• Total clubes: 1,88

Sampaoli dejó al Marsella quinto en su primera temporada, con un alto coeficiente de puntos de 1,91 por partido en los once de la Ligue 1 que dirigió. En la segunda, con el técnico de Casilda amoldando a su equipo desde marzo de 2020, fue a más y lo clasificó para la Champions como segundo, sólo por detrás del PSG, con una media de 1,87 puntos en el cómputo global de los 55 encuentros oficiales de esa temporada

En el conjunto de su etapa en el Marsella, en cuyo banquillo estuvo durante 66 partidos, tiene un promedio de 1,88 puntos. No está nada mal para la que fue su segunda aventura europea tras su paso por Brasil. En el Sevilla se quedó en 1,75 puntos por partido, debido a que su equipo se cayó en la segunda vuelta y sufrió un par de derrotas en la Champions y tres en las Supercopas de España y Europa, más la de la eliminación en la Copa del Rey a manos del Real Madrid con aquel polémico arbitraje de Mateu Lahoz. Pero certificó el récord de puntos de la primera vuelta, con 42.

Coeficientes de puntos de Lopetegui

• 19-20: 1,84
• 20-21: 2,03
• 21-22: 1,84
• 22-23: 0,71
• Total Sevilla: 1,85

Julen Lopetegui, en su mejor temporada, se quedó en 41 puntos en la primera vuelta, pero batió el récord de puntuación final, con 77. Fue en la temporada 21-22, en la que alcanzó un promedio de puntos por partido de 2,03. Un coeficiente altísimo que sólo logró Sampaoli en su periplo de plata en Chile con el Universidad (2,05 en 119 encuentros). En su primera y en su tercera campaña, el guipuzcoano se quedó en 1,84 puntos, por debajo del promedio del argentino en Marsella.

Quiere decirse con esto que el argentino está acostumbrado a vivir en las altas instancias de la competición. Incluso en su única aventura para levantar a un equipo, el Marsella, estaba bien clasificado, no en el fondo de la tabla como le sucede al Sevilla, un colectivo también acostumbrado a sentir la presión de los altos vuelos, no de los bajos fondos.

En ningún momento de su año y medio en la ciudad portuaria del mediodía francés estuvo siquiera coqueteando con los puestos de descenso. Todo lo contrario, siempre estuvo en zona europea, igual que en su primera temporada en Nervión. Por ello, tras caer al decimoctavo puesto pese al empate con el Athletic Club, afronta un reto nuevo.

Sucede asimismo que es la primera vez en este siglo que el Sevilla, tras la jornada octava de Liga, está en puestos de descenso. Hay que remontarse 20 años atrás para encontrar al Sevilla tan abajo. Fue en la temporada 02-03, pero era decimoséptimo con 7 puntos, uno más que ahora, y no estaba en puesto de descenso, después de perder el 3 de noviembre de 2002 en Mendizorroza (1-0). Para dar con un Sevilla en puesto de descenso a estas alturas hay que irse más atrás, pues ni siquiera en la última caída a Segunda División, en la 99-00, estaba tan abajo: también era 17º en la octava jornada con 7 puntos. Sólo en la nefasta 96-97, en una Liga de 22 equipos aún, presentaba peores números: 5 puntos y 20º puesto.

Se trata de simples recordatorios estadísticos que ni siquiera serán mirados por los profesionales del Sevilla. La labor de Sampaoli es precisamente alejar todo fantasma y limpiar las mentes ante el peligro de otro traspié liguero, en un contexto inédito para todos en el actual Sevilla. Salvo para los dirigentes... de José Castro a Monchi. Pero aquellos capítulos quedan muy atrás y ahora se trata de que la presente obra se quede en un simple e inquietante prólogo con un epílogo feliz.