Sevilla-Rayo Vallecano | La crónica
Este Sevilla es carne de purgatorio (1-0)
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Alivio, un hondo alivio por el deber cumplido después de "muchísima angustia". Ésa fue la sensación de Quique Sánchez Flores en su adiós como entrenador del Sevilla. "Me queda la sensación de alivio, han sido cinco meses de angustia", comenzó diciendo en su última rueda de prensa como entrenador sevillista.
Quique habló de los recesos de esa angustia. "Hemos encontrado oasis que nos han dado la vida y hemos sido el equipo que queríamos ser. Nos dan pena estos últimos partidos sin jugadores importantes por no haber remontado al final. Pero tengo la sensación del deber cumplido y de haber pertenecido a un gran club. Y le doy muchas gracias a la afición por el apoyo y el cariño. Ahora, alivio y descanso".
El técnico tiene necesidad de olvidarse de una temporada, cinco meses, que llegaron a tener momentos pavorosos. Tengo ganas de ver a mis hijos, a mi familia, me están esperando y tengo que desconectar también".
Preguntado por un periodista, Quique aclaró que su traje no era negro, como en la protesta de la afición, sino gris... "Es gris", dijo entre risas. "Me voy emocionado y feliz de que el Sevilla el año que viene tiene posibilidad de generar un nuevo proyecto, desde la placidez de estar en la categoría de la que nunca debió dudar, y pudiendo elegir a su entrenador. A mí lo que me puede llegar es que para quienes trabajo, que son los aficionados, haya reconocimiento. Creo que ha habido honestidad por nuestra parte y también críticas aceptables. Para mí es lo más importante, haber cumplido con el deber de quitarle la ansiedad a la afición".
Y volvió a explicar por qué él veía que no podía seguir... "Para seducir a los jugadores he tenido que usar palabras duras, para hacerles ver que no era yo, recién llegado, el que tenía el problema. Y eso da mucho desgaste. En otro momento de la historia del club puede que yo siguiera entrenando para un proyecto de cero. Pero ha habido una labor de desgaste muy grande con este grupo y estaba plenamente convencido de que no era yo el que tenía que continuar".
Quique le dio la oportunidad a En-Nesyri de ser aplaudido a solas por toda la grada al cambiarlo. "Lo merecía, nuestro máximo goleador y ha dado la cara en momentos importantes. Y en cuanto a los chicos no tengo duda de que es el camino, el de la identificación con la camiseta. Es la clave. Hay chicos que ya están ahí y si tenemos la suerte de que el Sevilla se quedan con sus jugadores estrella, Jesús y Sergio, sería magnífico".
"He visto mucha gente emocionada y eso está bien. No os creeríais la de jugadores veteranos que me han dicho que que han pasado por su peor momento en su trayectoria esta temporada. Eso se ha reflejado y muchos no saben si era su último partido en el Sevilla... Y mejor eso, la emoción, que nada. Mejor esa emoción", continuó explicando las sensaciones del último partido. ¿Y a Sergio Ramos cómo lo ve? "Sergio siempre ha estado muy firme y y sigue muy firme. Nos ha ayudado mucho y se lo agradecemos".
También fue preguntado por otro que dejaba su banquillo, Xavi. "Xavi siempre dice lo que piensa y no se guarda nada, es muy honesto. Y le he dicho que le ha tocado un proyecto de transición muy difícil y yo valor mucho que el año pasado fuera campeón de Liga. Tiene un problema grande el Barcelona que es el Real Madrid y yo se lo digo como quienes nos encontramos por la calle".
Sobre el encuentro, argumentó: "Ha sido un partido divertido, abierto, muchas ocasiones de gol, dos palos por cada equipo. Nosotros hemos jugado más rápido y vertical, ellos al pie como siempre. Lástima no haber hecho más semilla dentro de estas cosas que nos hubiesen gustado mantener. Ha habido muchos cambios de jugadores en partidos importantes y lo hemos sentido. Pero hoy la afición se divirtió, vio un buen partido de dos equipos con grandes jugadores y la pelota fue de un lado a otro".
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