Quique Sánchez Flores se reencuentra con 'su' estadio

El año 2024 será el juez del Sevilla. Con un final de 2023 desilusionante, los nervionenses buscan darle un vuelco a su temporada acogiéndose a la esperanza por el nuevo año... y a su entrenador. Quique Sánchez Flores asumió el cargo el pasado 18 de diciembre y en tan sólo dos partidos ya logró algo que no hizo su predecesor en el banquillo: ganar.

Ahora, el técnico madrileño debutará delante de su afición frente al Athletic Club, un equipo dirigido, precisamente, por un buen amigo suyo: Ernesto Valverde. Quique Sánchez Flores, de esa forma, regresará al Estadio Ramón Sánchez-Pizjuán, donde jamás se sentó en el banquillo local, pero sí estuvo en la grada.

Quique y el Sevilla, destinados a cruzarse

Quique Sánchez Flores jamás escondió su deseo de entrenar al Sevilla. De padre futbolista -militó en las filas del Real Betis entre otros-, heredó la afición por el deporte rey en España, llegando a ser jugador profesional en el Valencia, Real Madrid y Zaragoza, convirtiéndose tiempo después en uno de los entrenadores más longevos del fútbol español actual.

Pese a su larga trayectoria en los banquillos -ha dirigido a seis equipos distintos-, el madrileño guarda desde su infancia un vínculo emocional con el Sevilla. Su familia vivió un tiempo en la capital andaluza, donde tiempo antes su padre había estado jugando al fútbol, y Quique estudió en el Colegio PortaceliColegio Portaceli, a unos 850 metros del Ramón Sánchez-Pizjuán.

En aquel entonces, el técnico madrileño fue socio del Sevilla y se sentaba en la zona de Fondo, justo a la grada que miraba el pasado martes, cuando el club abrió las puertas del Ramón Sánchez-Pizjuán para el entrenamiento. Aquel momento fue captado por las cámaras de Diario de Sevilla y reafirmado por el propio Quique Sánchez Flores en sala de prensa, donde dejó palabras de cariño hacia el sevillismo: "Fue emocionante. Dice mucho que en un entrenamiento haya 16.000 personas. Dice mucho de la afición del Sevilla, una afición entregada, con pasión y cercana. Siente fuertemente a su equipo y está en nosotros en hacer que el campo empuje".

Frente al Athletic Club, Quique Sánchez Flores debutará en el banquillo local del Ramón Sánchez-Pizjuán. Un reto que para él va más allá de lo deportivo, cruzando, incluso, la línea de lo emocional. Para triunfar en Sevilla, aparte de 'exigir' más mimbres en el mercado invernal, sabe que debe ganarse a la afición y para lograrlo sólo hay un camino: la victoria.

Los tres primeros puntos del año, en juego en la casa del Sevilla... y la de Quique Sánchez Flores.