Previa del Quintanar - Sevilla: Los estímulos de la Copa

Día grande en Quintanar de la Orden, una jornada esperadísima por una localidad y un club con reconocidos sevillistas, y día para que el Sevilla de Diego Alonso empiece a construir ganando. Bueno, no es que un partido de primera ronda de la Copa del Rey ayude mucho a construir sin depender de las victorias, como solicitó ayer el técnico uruguayo, pero sí debe ser un primer estímulo para un torneo que en este siglo ha dado dos formidables alegrías al sevillismo, en 2007 y en 2010, y la posibilidad de disputar otras dos finales que terminaron en sinsabor, en 2016 y en 2018, ambas ante el Barça y con muy distinto resultado pese a que terminaran ambas con derrota.

Desde 2019 a 2023 se ha disputado la final del torneo copero en Sevilla, y desde 2020 en el Estadio de la Cartuja. Y hasta ahora no ha podido aprovechar el Sevilla esa circunstancia favorable. ¿Será a la sexta la vencida? En la incorporación de los equipos de Primera División todos comparten ese sueño inicial de poder alcanzar la final de un torneo que ofrece la posibilidad de un título, que se puede poner a tiro o no según los cruces y el rendimiento.

Diego Alonso, a por su primer triunfo

Y esa ilusión compartida empieza para el Sevilla en medio de un proceso de "construcción", como definió ayer Diego Alonso su labor al frente del equipo nervionense desde que relevase a José Luis Mendilibar en el último parón. Quintanar se aparece así como un pequeño ladrillo con el que seguir cimentando el edificio, porque es casi inimaginable un tropiezo, y lo que acarrearía, de este Sevilla tan necesitado de triunfos ante un equipo de Preferente Autonómica, cinco categorías por debajo.

Sí deben usar tanto el técnico como los jugadores que elija ese ladrillito como estímulo. El once elegido distará totalmente del que escogió para sus primeros tres partidos, ante Real Madrid y Arsenal, repitiendo alineación, y en Cádiz, donde apenas introdujo tres cambios en su equipo base. La mayoría de los titulares de esos tres partidos se quedaron en la comodidad de Sevilla, ahorrándose el viaje en autobús durante cuatro horas que sí tuvieron que hacer los 19 elegidos por el técnico uruguayo para iniciar esta aventura de la Copa.

Cinco canteranos en la convocatoria

Entre esos 19 jugadores falta gente importantísima, al margen de los lesionados Dmitrovic y Sergio Ramos -a ver en qué queda su lesión en el sóleo derecho, la zona que lo lastró en su primer curso en el PSG- y el enfermo Jesús Navas. Apenas Nyland repetirá de partida respecto al equipo que empató en el Nuevo Mirandilla y habrá lugar para que se revindiquen futbolistas que aún no han tenido protagonismo con el uruguayo, como el mismísimo Fernando, Joan Jordán o Badé. Junto a otros necesitados de minutos como Óliver Torres, el olvidado Januzaj o Rafa Mir, Diego Alonso conformará un once de suficientes garantías para batir al equipo de Preferente, que se estrena en estas lides de medirse a un grande de la Liga en la Copa.

La lista escueta de 18 convocados que es preceptiva en estas primeras rondas contra equipos de muy inferior nivel no permite incluir a muchos canteranos, so pena de dejar fuera a profesionales del primer equipo que también están necesitados de reivindicarse, elevar su voz y asir la camiseta que se les va a ofrecer hoy, festividad de Todos los Santos para que la defiendan. Así, sólo son cinco los canteranos que se subieron en el autobús para atravesar el Valle del Guadalquivir, Sierra Morena y La Mancha antes de pernoctar en Alcázar de San Juan, aún en Ciudad Real y a 30 kilómetros de la toledana Quintanar de la Orden.

Medio pueblo estará presente en el partido, gracias a que la Federación Española dio permiso tanto a la iluminación, aunque el partido debe terminar por los cauces normales sobre las 17:30 si no hay prórroga, como a las gradas supletorias. De los 10.000 habitantes de la localidad manchega, unos 5.000estarán en las gradas esperando la proeza ante el heptacampeón europeo. Pero el Sevilla no está para conceder hazañas épicas y sí para comenzar a construir el sueño olvidado de la Copa. El sábado, en Vigo, espera la dura Liga. Pero antes hay que poner un ladrillito en La Mancha.