Lamela se despide del Sevilla con el gol inolvidable a la Juventus como trascendental gesta

Sevilla FC

El argentino de 32 años se va del Sevilla después de haber defendido su camiseta en 92 partidos oficiales y haber marcado 16 goles

Las lesiones lo marcaron en su primera y su tercera temporada, pero su testarazo en la semifinal de la Europa League queda en los anales

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Lamela encabeza el festejo de los sevillistas tras el Sevilla-Juventus (2-1). / Antonio Pizarro

Erik Lamela (Carapachay, 04-03-1992) es uno de los futbolistas que dejará el Sevilla al cumplir contrato en junio de este año. El argentino tendrá un acto de despedida en el estadio Ramón Sánchez-Pizjuán (18:00) junto al trofeo que contribuyó a ganar: la séptima UEFA Europa League conquistada el 31 de mayo de 2023 en Budapest frente a la Roma.

Como viene siendo habitual, el club despedirá con honores a un futbolista que ha dado gloria al Sevilla. Y no es que Lamela haya tenido un paso espectacular por Nervión. Pero su contribución a la conquista del último torneo continental hace menos de un año: su testarazo desde el punto de penalti a centro de Bryan Gil en la prórroga de la semifinal con la Juventus (2-1) se queda en los anales del club blanquirrojo como uno de sus momentos más vibrantes.

Lamela se va después de tres temporadas en el Sevilla. Llegó en julio de 2021 dentro de la operación de traspaso de Bryan Gil al Tottenham Hotspur. Luego volvió cedido el barbateño y la historia tenía guardado para ambos ese momento histórico con destino a Budapest. En la final también fue protagonista marcando uno de los goles de la tanda de penaltis a la Roma, su ex equipo antes que el Tottenham.

Sus tres temporadas han sido muy irregulares debido a sus lesiones. En la que acaba de concluir apenas participó en 19 partidos oficiales y marcó dos goles. Los dos en sus trece participaciones ligueras. Justo cuando volvió a jugar un partido como titular después de su tercera lesión muscular esta temporada volvió a sufrir un percance y sufrió otra lesión. Esta vez traumática, en la rodilla. Ante el Granada resultó clave para el triunfo y terminó siendo aquel su último partido con el Sevilla. Su último servicio en Nervión el día que el equipo de Quique selló matemáticamente la permanencia.

Empezó con brío su primera temporada, marcando goles y dejando señales de su calidad técnica. Pero su estrella se apagó pronto por una lesión fortuita entrenándose en un hombro. Tuvo que pasar por el quirófano y casi se pasó desde su lestión esa primera temporada ya casi en blanco. Con todo participó en 24 encuentros oficiales aportando 5 goles y 3 asistencias.

Su segunda temporada como sevillista fue la mejor. Participó en 49 partidos oficiales y marcó 9 goles (3 asistencias) incluyendo el referido a la Juventus que tuvo tantísima trascendencia pues dio paso a la final ganada por el equipo de Mendilibar a la Roma.

En total como sevillista ha sumado como jugador del Sevilla un total de 92 partidos oficiales con 16 goles y 7 asistencias. Unos números que no están mal para un futbolista que destiló talento puntualmente aun sin encontrar la necesaria regularidad debido a las lesiones sobre todo. Se va uno de los héroes del milagro de Budapest.

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