Empieza la guerra psicológica por Koundé

En el Sevilla ya saben que Jules Koundé saldrá este verano. No es sólo la necesidad de generar plusvalías, como ya reconoció Monchi, sino que será imposible retener a un futbolista cuyo traspaso al Chelsea estaba ya concertado en la pasada pretemporada y el jugador además no entendió muy bien la vuelta atrás de los dirigentes en el último momento.

Hay que recordar que al francés le costó asimilar que debía quedarse en Nervión un año más e incluso que se negó a viajar a un partido con el equipo, a Elche, alegando no estar preparado anímicamente para jugar. Después entró en razón, aunque su rendimiento (siendo muy bueno) no ha rayado al mismo nivel que en la temporada pasada y se perdió muchos encuentros por diferentes problemas físicos.

Ahora, todo el mercado sabe que es una pieza apetecible y aunque el Chelsea tiene ventaja, sus rivales piensan aprovechar que la situación de propiedad del club londinense aún no está normalizada para tratar de adelantarse. Uno de los primeros que lo intenta, parece, es el Barcelona, aunque el club catalán tiene un problema de liquidez.

Xavi Hernández ha comunicado a la directiva culé que su preferido en la liga española es Koundé, aunque por delante ha puesto, según Mundo Deportivo, al senegalés del Nápoles Koulibaly, más hecho (30 años) y que termina contrato en 2023. Pau Torres también está en las quinieñas.

En Inglaterra ya se publicó que el nuevo dueño del club de Stamford Bridge, Todd Boehly, ya ha contactado con el entorno de Koundé para avanzarle que será el primer fichaje en cuanto el gobierno británico apruebe la operación de compra-venta y tenga vía libre para cerrar operaciones. El acuerdo por cinco temporadas que ya cerraron ambas partes hace un año se mantendría, incluso se podría mejorar. Habrá que ver si el Chelsea llega a tiempo o si se le adelanta alguno.

Mientras, en el Sevilla a Monchi le va a ser difícil ya sacar más de los 55 ó 50 millones de euros que rechazó el Sevilla tras las tentativas de Manchester City y Chelsea. Pero el jugador ya sabe que no va a seguir y en el club también está claro.