Dmitrovic, sobre la agresión sufrida: "El aficionado estaba borracho y alocado"

Sevilla FC | Vestuarios

El portero serbio fue titular tras la indisposición de Bono y lamentó el incidente final donde fue víctima del intento de agresión de un espontáneo

Así fue la agresión del espontáneo a Dmitrovic en el PSV Eindhoven-Sevilla

This browser does not support the video element.

Agresión a Dmitrovic en el partido del PSV.
M. Reina

23 de febrero 2023 - 21:36

Marko Dmitrovic fue el protagonista al final del partido por un lamentable incidente de un aficionado neerlandés que saltó al césped desde la grada para golpear al meta serbio.

"Un aficionado me empujó desde atrás, supongo que enfadado por el resultado", explicó el portero sevillista. "Estaría borracho y alocado. Intento pegarme y conseguí agarrarlo y tirarlo al suelo hasta que viniese la seguridad", relató Dmitrovic. "Me voy a callar para no decir lo que de verdad quería hacerle. Afortunadamente, me alegro de haber sido consciente de dónde estaba y haberle reducido", aseguró.

El serbio lamentó el incidente: "Nunca es bonito ver estas cosas, no deberían pasar. Espero que estos actos estén bien castigados".

Sobre el transcurso del partido, el portero coincide en la lectura general: "Hemos empezado bien el partido. Luego creímos que el partido iba a terminar así. Tuvieron juego poderoso con los balones aéreos". Sin embargo, el meta cree que "supimos terminar el partido y pasar a la siguiente ronda".

Dmitrovic fue titular al suplir a un Bono que se sintió indispuesto cuando ya había sido incluso anunciado en la alineación titular. "Nunca es bonito jugar por una baja del compañero", señaló. "Tengo que estar preparado para cuando pueda jugar. Intenté dar todo lo que pude".

Sobre el posible rival en ocatvos de final de la Europa League, el portero no tiene ninguna preferencia: "Nosotros nos miramos a nosotros. Vamos a analizar nuestro partido, corregir errores y descansar porque el domingo está aquí".

No hay comentarios

Ver los Comentarios

También te puede interesar

Lo último

Borgo | Crítica

Una mujer en Córcega