Tribuna Económica
Joaquín Aurioles
Inventarios de diciembre (4). Desigualdad
Sevilla FC
El paso al lado que Rakitic creyó conveniente dar para ayudar con su salida, ya que en el campo no podía como él quería aun sintiéndose capacitado, le da un importante margen de maniobra al Sevilla. El club anunció en la tarde de ayer la cesión hasta el final de temporda en el Anderlecht, donde coincidirá con otros dos sevillistas aún con contrato, Delaney y Augustinsson, el primero con opción de compra. También está allí Dolberg, aunque éste, afortunadamente, ya se desvinculó al ser traspasado. Es decir, Gattoni regresará en junio, pues su cesión es pura, sin opción alguna, con el sueco. Sobre el danés, ya se verá.
Eso no preocupa tanto ahora a un Sevilla que anda enfrascado en cerrar el fichaje del delantero que complete los refuerzos invernales, tras los de Hannibal y Agoumé. Y la posibilidad abierta más cercana, aunque José María del Nido Carrasco dijera que no es la única, es la del delantero eslovaco.
El Sevilla está dispuesto a adquirir en propiedad al potente delantero de 1,88 metros nacido en Terchová (Eslovaquia) en 1999, para lo que debería pagar un traspaso al Boavista, que en 2022 pagó por él dos millones al Feyenoord.
El club neerlandés se hizo con sus servicios en 2020 4 millones de euros al MSK Zilina, su club de origen en Eslovaquia. No cuajó en la Eredivisie y fue cedido primero al Fortuna Düsseldorf y luego al Boavista, donde sí despuntó hasta el punto de que el club luso pagó la mitad de lo que invirtieron los de Rotterdam dos años después. Curiosamente, en su primera temporada en Portugal coincidió en el Boavista con Yusupha Njie, el hijo del recordadísimo Biri Biri. Ahora puede ser él el que venga a Nervión.
Mañana se cierra el plazo y hoy debe ser una jornada decisiva para que se culminen las negociaciones por Bozenik, que lleva siete goles y dos asistencias en 19 partidos de la Liga Portugal.
También te puede interesar
Lo último
1 Comentario