Banega abre por fin la lata

Llega el maná para el aficionado de a pie, el alimento del sevillismo en época estival, los siempre esperados fichajes. Y lo hace con una incorporación sonada, ya que el Sevilla le dio anoche oficialidad a un regreso ya cantado desde la noche del pasado lunes. Éver Banega es de nuevo futbolista del Sevilla después de que miembros de la comisión ejecutiva del club cerraran un acuerdo final con el Inter, último y no por ello poco importante escollo que faltaba por saltar para dar por hecha la incorporación del centrocampista internacional argentino, quien cuajó dos sensacionales campañas como sevillista coronadas con dos títulos de Europa League, alzados en Varsovia –donde fue elegido mejor jugador de la final– y en Basilea, en 2015 y 2016.

Después de que hace un par de semanas la entidad de Nervión llegara a un acuerdo con el jugador por tres temporadas, Sevilla e Inter cerraron la operación en una cantidad que se detuvo en 7,5 millones de traspaso un año después de que abandonara el Ramón Sánchez-Pizjuán a cambio de 1,5 utilizando la cláusula de penalización que figuraba en su anterior contrato con el Sevilla, en el caso de que Banega se negara a prorrogar el año que automáticamente entraba en vigor al superar una serie de partidos.

Banega, que cumplirá precisamente mañana 29 años, se convierte así en el primer fichaje del proyecto Berizzo y también en la primera incorporación de la era Óscar Arias al frente de la dirección deportiva una vez que Monchi emprendió camino a Roma dejando atras 17 años como máximo responsable técnico.

El genial centrocampista, que percibía en el Inter una ficha anual de 3,5 millones de euros netos, prorratea esas cantidades en una tercera temporada para que la amortización del fichaje entre en los números que quería el Sevilla, que le abonará un sueldo de dos millones netos por campaña.

Vuelve así quien fue un auténtico ídolo del sevillismo y quien viene a cubrir la función que en la pasada campaña desempeñaba Samir Nasri. Además, la llegada de Banega descarta por completo la opción del valencianista Dani Parejo.

Banega, que tenía otras ofertas encima de la mesa, regresa tras, pese a todo, no haber haber hecho un año malo en su aventura en el Calcio, donde disputó un total de 33 partidos, marcando 8 goles y 6 asistencia. Esos 33 encuentros los repartió entre 28 en la Serie A, cuatro en la Europa League y uno en la Copa de Italia. Ha pesado en su decisión de volver el recuerdo que dejó tanto el Sevilla como la cuidad en un profesional que se rehabilitó para el fútbol de la mano de Unai Emery en Nervión. De hecho, Banega volvió a ser un asiduo en la selección argentina a raíz de sus buenas actuaciones con la camiseta del Sevilla. Destacable fue cómo el propio futbolista, tras rechazar una oferta de renovación presentada por José Castro, anunció su adiós personalmente y micrófono en mano ante cerca de 40.000 sevillistas durante la fiesta de celebración de la última Europa League en el Sánchez-Pizjuán.

Con Banega el Sevilla espera desencadenar el carrusel de anuncios oficiales habitual en estas fechas y que tanto ansía el sevillismo. El club tiene varias operaciones muy avanzadas y en algunos casos casi rematadas. Una de ellas es la del delantero colombiano de 26 años de la Sampdoria Luis Muriel, quien se convertirá en el referente del ataque para el proyecto de Berizzo a cambio de unos 20 millones de euros, por lo que protagonizará la mayor inversión en la historia del club por un jugador. Igualmente, también debe ser inminente la llegada oficial de Nolito, éste en calidad de cedido por el Manchester City, club con el que se discuten algunos detalles de la negociación, como la opción de compra.

Más alejados están los casos de Jovetic y Jesús Navas sin que estos jugadores hayan dejado de interesar, como también hay otras operaciones en las que está trabajando el club, las del lateral Amavi (Aston Villa), el defensa Zouma y el delantero Batshuayi (ambos del Chelsea). También, en caso de una venta de Mariano, el lateral del Lille Corchia, según ElDesmarque.