La voz de un gregoriano de Sevilla

Son catorce voces dedicadas a un canto litúrgico "muy especial, marcado por la espiritualidad", pero para practicarlo no es necesario ser creyente. De hecho, en los 14 años de existencia de la Schola Gregoriana Hispalensis, dice su presidente, Joaquín Romero Lagares, "han pasado todo tipo de personas, desde curas o seminaristas hasta ateos, porque la belleza de su melodía emociona. Existe desde el siglo XI y sus obras siempre se han cantado con la misma belleza, permanecen intactas". Dirigido por Ricardo Rodríguez, también director del Coro Manuel de Falla, esta agrupación vivió una primera etapa de voces mixtas que no obtuvo buen resultado. En la actualidad, la iglesia de San Lorenzo se abre los martes, a las 20:30, a los ensayos de un coro masculino que dedica todos sus esfuerzos a promocionar este canto en Sevilla. "Curiosamente, hemos actuado en los más importantes festivales de ciudades como Málaga pero aquí nos es más difícil actuar". A pesar de ello, son muchas las iglesias y conventos sevillanos que ya han gozado de la interpretación de los cantos gregorianos de esta Schola a lo largo de los años. Entre sus proyectos destaca la biblioteca que en San Lorenzo están formando con estudios sobre el gregoriano, revistas especializadas y música medieval. Entre los logros, el Curso de Verano de la UPO que tuvo un "gran aceptación", así como el disco que con motivo del décimo aniversario grabaron.