El Virgen del Rocío usa piel artificial como medicamento para los grandes quemados
Salud
El centro se convierte en el primero del país en obtener la autorización de la Agencia Española del Medicamento para su uso hospitalario como terapia avanzada
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La huella de los injertos casi pasa inadvertida. "Sólo son cicatrices", afirma sonriente y un poco abrumado Álvaro Trigo Puig, un madrileño de 30 años con familia en Andújar (Jaén) donde la mala fortuna hizo que en 2018 se viera atrapado en un incendio causado por las llamas de una chimenea que le dejó el 63% de su cuerpo quemado, en su mayoría piernas y espalda.
Hoy se ha convertido en ejemplo en Sevilla, a cientos kilómetros de distancia de la tierra que lo vio nacer y de la que un día casi le quita la vida. Un ejemplo, no sólo de vitalidad, por la entereza con la que ha formado parte del equipo de sanitarios y autoriades que han detallado el que se puede considerar el mayor hito de la historia reciente de la sanidad pública andaluza, con el Hospital Virgen del Rocío como uno de sus baluartes; sino también de los logros y avances de la sanidad que se hace en Andalucía, por convertirse en el espejo en el que pueden mirarse pacientes de toda España que, por circunstancias similares, lleguen a la Unidad de Grandes Quemados del hospital sevillano, que es referencia a nivel nacional, y desde ahora la primera de todo el país autorizada por la Agencia Española del Medicamento para el uso terapéutico de la piel artificial. Para ello, cuenta como socia con la Universidad de Granada, ya que es allí donde se hace el tejido con células del paciente y biomateriales en un laboratorio del Hospital Virgen de las Nieves, y desde donde se envía a Sevilla para que lo injerte en sus pacientes.
El incidente que calcinó más de la mitad del cuerpo de Álvaro le tuvo más de dos meses ingresado en el Virgen del Rocío. Pasado este tiempo, comenzó a recibir tratamiento con la piel humana artificial, llegando a utilizar hasta 60 láminas, de 12x12 centímetros, sólo en espalda y piernas. Ahora puede contarlo lleno de orgullo y el uso de piel artificial como medicamento de terapia avanzada le ha permitido recuperar su vida.
"Prácticamente al año ya estaba perfectamente. Estoy hablando de una piel totalmente funcional. Me ha permitido hacer cosas que prácticamente ni imaginaba que pudiera volver a hacer hacer e, incluso, cosas que nunca antes había hecho", ha explicado el joven este martes en las propias instalaciones del hospital sevillano. "La recuperación sí requirió un mayor esfuerzo y poner mucho de mi parte, siempre siguiendo las indicaciones de los doctores. No puedo estar más contento", ha añadido.
El medicamento se llama Piel humana obtenida por ingeniería de tejidos y detrás de este hito científico sin precedentes están la Unidad de Grandes Quemados del hospital sevillano junto al laboratorio GMP de la Unidad de Producción Celular e Ingeniería Tisular del granadino Virgen de las Nieves. Los detalles se han contado este martes en el Aula Magna del Virgen del Rocío, en presencia de la consejera de Salud y Consumo, Catalina García. También han asistido a la presentación el secretario general de Salud Pública e I+D+i en Salud, Isaac Túnez; el delegado territorial de Salud y Consumo en Granada, Indalecio Sánchez-Montesinos; el rector de la Universidad de Granada, Pedro Mercado; el director gerente de la Fundación Progreso y Salud, Gonzalo Balbontín; así como los directores gerentes de los hospitales Virgen del Rocío, Virgen de las Nieves y San Cecilio de Granada, Manuel Molina, María Ángeles García Rescalvo y Manuel Reyes, respectivamente, entre otras autoridades.
La piel artificial es un super medicamento que en el caso de Álvaro permitió cubrir toda la parte afectada por las quemaduras, disminuyendo las "agresiones" al paciente, puesto que no hay que quitarle más piel sana para hacer injertos en otras localizaciones, y agiliza la recuperación y estancia hospitalaria, por le menor riesgo de infección y dolor en las curas. Se trata de piel cultivada obtenida a partir de células del propio paciente mediante una biopsia de piel sana de sólo 3x3 centímetros.
"A partir de ese pequeño segmento de piel sana y de esa biopsia, en la unidad de cultivos se amplifica y se genera el número de centrímetros cuadrados que necesitamos en función de la extensión de la quemadura del paciente", ha explicado ha explicado Purificación Gacto, jefa de la Unidad de la Gestión Clínica de Cirugía Plástica y Grandes Quemados del hospital. "La piel es un órgano con mucha más importancia de la cosmética o la estética. Porque cuando se pierde esta primera barrera cutánea de una manera masiva, nos deja totalmente expuestos al exterior”, ha añadido junto a parte del equipo de especialistas trabaja habitualmente con la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital sevillano, donde suele quedar ingresado en primer lugar el paciente gran quemado que llega de urgencias hasta su estabilización.
Así, tras esta primera fase del proceso, que suele durar tres o cuatro semanas, en las que el paciente sigue sus cuidados, una vez que toda la cantidad de piel artificial está preparada, se hace una intervención quirúrgica y se coloca sobre la superficie cutánea cruenta. La doctora ha destacado que, respecto a otros productos que existían en el mercado, su relevancia es que da "muy buena calidad de vida, sin límites", en lugar de limitarse a la supervivencia del paciente. "Es una calidad de vida óptima para que el paciente pueda, no sólo retomar su vida anterior al accidente, sino no tener límites ni ponerse ningunmo. Ese es el mayor hito de este avance, el darle una mayor esperanza a este tipo de pacientes", ha apostillado.
La piel en cuestión es generada en laboratorios públicos con una infraestructura que sigue unos estándares de calidad y seguridad muy estrictos (condiciones GMP, Good Manufacturing Practices). Los especialistas del Virgen del Rocío han atendido ya a dieciocho pacientes, seis de ellos menores, con cultivos de piel artificial personalizados, desde que en 2016 se incorporara este tratamiento como uso compasivo, ahora acreditado por la Agencia del Medicamento. El perfil del paciente que se beneficia de esta cobertura es también muy concreto. No pueden presentar infecciones activas en la superficie cutánea y suelen tener de un 60 a un 90 por ciento de su superficie corporal quemada en los pacientes adultos, y más del 30% si se trata de un paciente pediátrico.
Por su parte, el laboratorio GMP de la Unidad de Producción Celular e Ingeniería Tisular del Hospital Universitario Virgen de las Nieves, coordinado por la Red Andaluza de diseño y traslación de Terapias Avanzadas, fabrica esta cobertura a partir de la muestra de piel sana. Los especialistas obtienen en laboratorio las células de la dermis y de la epidermis que integran en una malla de fibrina agarosa que colocan como cobertura posteriormente al paciente, para que sobre ella crezca tejido sano hasta quedar integrada en su nueva dermis. Este proyecto en particular ha crecido desde su desarrollo preclínico inicial en el Grupo de Ingeniería Tisular de la Facultad de Medicina de la Universidad de Granada. Hasta la fecha, el Virgen de las Nieves ha fabricado más de 12 metros cuadrados de láminas de piel humana artificial a partir de las muestras remitidas por el Virgen del Rocío, para los 18 pacientes tratados.
Para conseguir esta autorización por la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios (AEMPS), el Hospital Virgen del Rocío, junto con la Red Andaluza de Diseño y Traslación de Terapias Avanzadas, ha tenido que elaborar un dossier de registro que recoge toda la información relativa al desarrollo del medicamento. Esto incluye desde las etapas de investigación básica, la investigación clínica, la fabricación como un medicamento de uso humano, así como todo lo relativo a la vigilancia de la seguridad y la farmacovigilancia, de modo que se pueda garantizar la calidad, seguridad y eficacia del medicamento. Un proceso que se inició en 2012 y que ha concluido con la aprobación final este 2024, según han detallado los investigadores.
Además, la Unidad de Farmacología Clínica del Virgen del Rocío es la encargada de supervisar, junto con la Red Andaluza de Diseño y Traslación de Terapias Avanzadas, la seguridad del uso de este tratamiento, que aplican los profesionales de la Unidad de Cirugía Plástica y Grandes Quemados. La Unidad de Grandes Quemados del Hospital atiende cada año a más de mil pacientes de urgencias procedentes de toda Andalucía, Canarias, Ceuta, Melilla y parte de Extremadura.
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