La víctima del crimen de San Jerónimo tenía antecedentes por tirones y robos con navajas

La víctima del crimen de San Jerónimo era un delincuente con antecedentes por tirones y robos con navaja. Jesús G. M., de 48 años y conocido como el Pepuli, era toxicómano y solía ejercer como gorilla en una zona cercana al barrio. En los últimos años había mantenido unas rencillas vecinales con las personas que han sido detenidas por el homicidio, que incluso tuvieron que mudarse para evitar problemas.

Según han explicado a este periódico varios vecinos de la zona, la víctima había sometido supuestamente a una campaña de acoso a su vecino y habría ido a buscarlo incluso a su nuevo domicilio. Solía increpar no sólo a su vecino, sino también a algunos familiares de éste menores de edad. En la mañana del domingo, ambos se encontraron en la calle Marruecos y se enzarzaron en una pelea, que terminó con la muerte por arma blanca de Jesús G. M.

La Policía Nacional detuvo al presunto autor del homicidio, de 28 años, poco después de los hechos, ocurridos sobre la una tarde del domingo. Horas después, la noche del mismo día, fue arrestado también un familiar de este joven, cuya participación se está investigando en estos momentos. Ambos hombres permanecen en dependencias policiales a la espera de pasar a disposición judicial en las próximas horas.

El Grupo de Homicidios está trabajando en estos momentos en el caso. La reyerta habría sido presenciada por una menor de edad, familiar del presunto autor del crimen. El presunto autor del homicidio carece de antecedentes e incluso en estos momentos se está organizando una recogida de firmas en su apoyo en el barrio de San Jerónimo.

"Todas las personas que firman este documento queremos dejar constancia de que somos conocedores de que la persona fallecida llamada y su hermano son dos personas conflictivas y venían ejerciendo amenazas constantes y prolongadas en el tiempo sobre la familia (de los detenidos)", reza un documento que se está distribuyendo por comercios del barrio.

El texto continúa diciendo que los dos implicados en el crimen "son personas muy queridas en el barrio, que jamás han tenido conflictos con nadie, son respetuosos, serviciales y muy buenas personas". El papel añade que la "familia abandonó su hogar para evitar que los conflictos generados por Pepuli y su hermano cesaran".

Son muchos los vecinos que acusan a la víctima del crimen, Jesús G. M., de provocar la situación que ha terminado con su vida. Este hombre es un conocido delincuente de la zona, que cuenta con diversos antecedentes por distintos delitos. Fue detenido en los años 2009, 2010 y 2011 por varios tirones y robos con navaja.

Uno de estos tirones sucedió en diciembre del año 2009 en la calle Santa María de Ordás. Dos meses antes, cometió otro en la Ronda de Capuchinos, donde robó a una joven de nacionalidad francesa, a la que arrastró por el suelo tras haberle asestado el tirón desde un ciclomotor. Se llevó dos móviles, uno de los cuales vendió en las inmediaciones de San Jerónimo y con el otro llamó a su hermana poco después del robo. Fue detenido casi un año y medio después después.

En mayo de 2010, asestó otro tirón en la calle Feria. Fue detenido después por hacer una llamada con el móvil sustraído a las dos horas del robo. En julio de 2011 volvió a ser detenido por un robo con navaja a una mujer en la calle Agricultores, en Pino Montano.