"Un vecino oyó un grito pero no le dio importancia"

El padre de Marta del Castillo asegura que su hija no ha podido llegar lejos por sus propios medios y que ha recibido llamadas que la sitúan en Jerez, El Puerto y Alicante.

Las amigas y compañeras de colegio no paran de buscarla desde su desaparición.

Foto: Antonio Pizarro
Las amigas y compañeras de colegio no paran de buscarla desde su desaparición. Foto: Antonio Pizarro
Cristina Valdivieso

27 de enero 2009 - 18:41

Antonio del Castillo, padre de la joven desaparecida el pasado sábado a las puertas de su casa, en la sevillana calle Argantonio, ha celebrado en la tarde de este martes una rueda de prensa para ofrecer algunos detalles sobre la evolución de la investigación en torno al paradero de la joven, de 17 años.

Muy emocionado y presa de las lágrimas en diversos momentos de su comparecencia, el padre de Marta del Castillo Casanueva reveló que un vecino "oyó un grito" a la hora en la que la menor fue vista por última vez "pero no le dio importancia".

Tras una mesita de bar montada en la calle como pupitre improvisado, Antonio del Castillo agredeció las numerosas muestras de apoyo recibidas y los distintos avisos sobre su posible paradero, avisos que han situado a Marta en Alicante, Jerez y El Puerto, si bien el propio padre reconoció la facilidad de confusión al tratarse de una joven "delgada, rubia y vestida de manera normal".

En lo que sí insistió el padre es en la dificultad de que haya llegado demasiado lejos por sus propios medios, puesto que relató que Marta "no llevaba dinero, no cogió ropa y no tiene tarjetas de crédito".

Respecto al joven que acompañó a Marta hasta su casa la noche de autos, Antonio del Castillo reconoció que en efecto ha sido interrogado por la Policía, que trabaja en dos grupos de investigación. El amigo de la joven habría declarado haberla dejado en la puerta de su casa en torno a las nueve y media de la noche.

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