La US tendrá un nuevo Laboratorio de Investigaciones Contemporáneas

Se ubicará en el Cicus y su programación será independiente a la del futuro museo de la Hispalense

La apertura está prevista para la segunda quincena de octubre

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Fachada principal del Cicus en la calle Madre de Dios. / Redacción Sevilla

Kandinsky decía que “el arte va más allá de su tiempo y lleva parte del futuro”. Una reflexión que podría valer como lema del nuevo Laboratorio de Investigaciones Contemporáneas (LIC) que proyecta la Universidad de Sevilla. Un espacio que tendrá una programación y una actividad totalmente independiente a la que se desarrolle en el futuro museo de la institución. Incluso el emplazamiento será distinto. Mientras que la pinacoteca de la Hispalense se ubicará en el mismo Rectorado, el LIC ya está buscando su hueco en el Centro de Iniciativas Culturales (Cicus) de la calle Madre de Dios. 

Un proyecto que aspira a convertirse en “la punta de lanza de los análisis de la contemporaneidad en la Universidad”, explica a este periódico Luis Martínez Montiel, director del secretariado de Patrimonio Histórico de la Hispalense. Y no sólo se refiere al arte, que podría ser la disciplina más evidente, también a la música, a la fotografía o a la documentación. 

Ya hubo un primero conato de agrupar todas las obras pertenecientes al arte de nuestro tiempo. De hecho, el fondo de Arte Contemporáneo –que se puede ver en la web de Patrimonio Cultural de la US– surgió en el año 2008 para agrupar obras dispersadas en las instalaciones universitarias, realizadas en su mayoría por artistas andaluces nacidos durante el siglo XX. Unas producciones artísticas que reflejan buena parte de las tendencias coetáneas que transitan entre la figuración y la abstracción. Carmen Laffón, Teresa Duclós, Luis Gordillo, Chema Cobo o Manuel Barbadillo son algunos de los autores emblemáticos que forman parte del fondo.

Pendientes del mobiliario

“En estos momentos estamos cerrando el mobiliario”, apunta Martínez Montiel y hace hincapié en “que estamos en obras, terminando de cerrar la planta primera”. El director cree que este nuevo espacio abrirá sus puertas a partir de la segunda quincena de octubre aunque el fin de la reforma esté emplazado para septiembre. Eligiendo el camino de la cautela, el director indica que la exposición que coincidirá con la inauguración de este nuevo espacio será “una de las dos donaciones” que la Hispalense tiene previsto recibir. 

“El LIC se centrará en el mundo contemporáneo. Hay una demanda por parte del entorno del Cicus de que tuviéramos salas para que pudieran ir a investigar o para que pudieran ir a leer cualquiera de los libros que tenemos allí”, explica Martínez Montiel. Recalca que será de “uso público” para que “cualquiera que quiera escuchar música contemporánea tenga los aparatos posibles y para el que quiera leer poesía contemporánea también pueda hacerlo”. Según el experto, guardará cierto parecido con “una biblioteca especializada”, pero también con “un taller de investigación” en el pleno centro. 

Se trata “de poner en valor lo que tenemos en nuestro entorno, a veces sólo valoramos lo antiguo, pero no lo que estamos haciendo ahora”, manifiesta el director y recalca “que el patrimonio también se crea”.

Donaciones

Precisamente esta idea es el germen para la puesta en marcha del Laboratorio de Investigaciones Contemporáneas, porque además este espacio tratará de poner “en valor distintas donaciones que nos han ido haciendo”. 

Martínez Montiel indica que Patrimonio también está trabajando en el museo de la Hispalense. Señala que habrá un kilómetro cero o “museo central” en la antigua Fábrica de Tabacos que “será el que elija determinadas piezas de forma temporal de toda nuestra colección”. Y, en paralelo, “seguiremos potenciando y manteniendo el fondo de las distintas colecciones”. Por ejemplo, el fondo de Modelos Anatómicos o el de Química.  

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