Una treintena de fresnos jóvenes de la Alameda también se han secado

El problema de los árboles que se han secado en Sevilla, por la sequía y por la paralización del contrato para el refuerzo de riego con agua no potable, se extiende también a la Alameda de Hércules. Una treintena de fresnos que se plantaron en 2021 en este bulevar se han quedado completamente secos, situación que contrasta con la abundante hierba que puede verse en los alcorques donde están enraizados.

Desde la plataforma Salva tus árboles Sevilla aclaró este jueves a este periódico que no es la primera vez que las plantaciones de la Alameda se secan. Esta entidad, que trabaja por la defensa del árbol y los espacios verdes de nuestra ciudad, recuerda que lleva años solicitando al Ayuntamiento de Sevilla los certificados de calidad y origen de las plantaciones que se acometen en la capital. Sin embargo, hasta ahora esta información no se ha facilitado.

“Es necesario que se publique el Plan de Plantaciones detallado, así como los certificados de calidad y origen de los árboles que se van a plantar. Cuanto antes”, ha vuelto a reclamar la plataforma esta misma semana al Ayuntamiento de José Luis Sanz.

La plantación de 37 fresnos y un almez en la Alameda se remonta a enero de 2021, en el mandato de Juan Espadas. Entonces el Consistorio anunció la campaña de replantación de esta gran superficie del Casco Antiguo dentro de las 111 unidades previstas en aquella campaña para este distrito.

A través de la Delegación de Transición Ecológica y en coordinación con el Distrito Casco Antiguo, se culminó la plantación de 38 árboles en alcorques vacíos situados en la Alameda. El Ayuntamiento aseguró que se trataba de “la actuación de mayor envergadura planificada en el Distrito Casco Antiguo dentro de la campaña 2020-2021”. Aquella actuación se enmarcaba en el objetivo de alcanzar los 5.000 ejemplares repartidos entre viario público, jardines y parques en todos los distritos de la ciudad. La campaña empezó en noviembre y se prolongó hasta los meses de marzo o abril con idea de llenar de árboles 1.700 alcorques vacíos teóricamente preparados para acoger árboles.

Desde mediados de agosto, el gobierno de Sanz sacó por vía de urgencia dos contratos de riego con agua no potable de 18.000 y 70.000 euros con los que se está regando.