Los trabajadores de Lipasam aceptan un preacuerdo para frenar la huelga

Los trabajadores de Lipasam frenaron ayer la huelga del servicio de limpieza en la ciudad prevista para hoy Miércoles Santo gracias a un principio de acuerdo al que llegaron los directivos de la empresa municipal y el comité tras días de continuas negociaciones. La inmensa mayoría de los empleados, concretamente 725, votaron en contra del paro laboral, que estaba previsto hasta el Sábado Santo, y a favor del preacuerdo. Mientras que 79 trabajadores votaron a favor del paro. Tras el recuento de las papeletas, el comité de empresa desconvocó la huelga, la primera que iba a afrontar el alcalde, Juan Ignacio Zoido, en plena Semana Santa.

La crisis laboral en Lipasam se originó a raíz de la aplicación de la reforma laboral decretada por el Gobierno central en el convenio colectivo de esta empresa municipal. Los reajustes se traducen en una aumento de la jornada laboral hasta las 37,5 horas semanales y en una reducción del 5% en los salarios, entre otras medidas. Los sindicatos UGT y CCOO entienden que estas medidas del decreto ley son de aplicación a los funcionarios del Estado, no así a los trabajadores del Ayuntamiento. Las centrales esperan las resoluciones judiciales que aclaren el ámbito de aplicación de estos recortes laborales. Y mientras tanto han alcanzado un principio de acuerdo para continuar negociando los posibles ajustes.

Los directivos de Lipasam y los representantes de los trabajadores acercaron posiciones ayer a las siete de la tarde, tras una hora de reunión. El preacuerdo se traduce en una prórroga del actual convenio colectivo hasta finales del presente año. De modo que las negociaciones del próximo convenio y los cambios que incluirá, así como los ajustes, comenzarán después del próximo verano.

El segundo punto del preacuerdo apunta a la ampliación de la jornada laboral de 35 horas a 37,5 horas semanales, un reajuste que según denunció el presidente del comité, José Luis González (CCOO), "supone un retroceso de 26 años en derechos laborales". Tras la asamblea de ayer, el Ayuntamiento se ha comprometido a aplicar esta medida en Lipasam cuando se lleve a cabo en el resto de los trabajadores públicos del Ayuntamiento y en sus organismos. El presidente del comité recordó ayer que "Lipasam tiene unas cuentas saneadas, en comparación con otras empresas que están mucho peor".

En cuanto a otro de los puntos que originó el conflicto laboral, una reducción del 5% en el gasto de personal, la empresa y los trabajadores alcanzaron el compromiso de estudiar y concretar cómo se aplicará esta medida durante los próximos ocho meses. La rebaja en los salarios no llegará, en principio, hasta enero del próximo año. Con ello, los sindicatos han logrado posponer, de momento, la merma salarial a estos trabajadores. La gestión y la organización del servicio de limpieza también centró parte de las conversaciones que terminaron con el compromiso de crear un modelo organizativo que la empresa concretará este año.

José Luis González valoró el preacuerdo y aplaudió la "declaración de intenciones por parte de la empresa para conservar su carácter público, mantener a la plantilla, garantizar la estabilidad de los trabajadores y mejorar la gestión basándose en el quilibrio financiero".