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Los sindicatos plantan cara al gobierno por el pacto laboral tras la dimisión de Carrillo

Las centrales sindicales deciden hoy un calendario de movilizaciones por la decisión que deja en el aire la creación de 189 puestos y la cobertura de 300 vacantes · El gobierno afirma que hay indicios de ilegalidad

Claudio J. Castillo

27 de abril 2009 - 07:02

La dimisión como concejal de Recursos Humanos que hoy formalizará el edil socialista Emilio Carrillo en la reunión que mantendrá con el secretario provincial del partido, José Antonio Viera, por sus diferencias irreconciliables con el gobierno de Sánchez Monteseirín van más allá de una nueva fractura a la pax armada firmada recientemente entre críticos y oficialistas para intentar salvar los datos que arrojan las encuestas electorales de cara a 2011. El portazo de Carrillo al Ejecutivo local por sus dos últimos desencuentros en la gestión de la cartera de Personal -el desalojo del edificio municipal de Diego de Riaño tras presuntas vibraciones estructurales y, sobre todo, la retirada de junta de gobierno del pacto laboral negociado con los cinco sindicatos y aprobado en Pleno- deja a más de 5.500 trabajadores municipales desairados por no ver concretado el acuerdo de negociación colectiva y a la espera de que las centrales sindicales muevan pieza en este nuevo pulso que trasciende las fronteras de la política.

Los cinco sindicatos con representación en el Ayuntamiento de Sevilla -CSI-CSIF, UGT, CCOO, SPB (Bomberos) y Sppme (Policía)- han convocado hoy una reunión a las 11:00 para determinar las acciones reivindicativas de las centrales sindicales y el establecimiento de movilizaciones, según avanzaron ayer a este periódico los portavoces de las agrupaciones laborales señaladas.

El secretario general de UGT en el Consistorio hispalense, Santiago de los Reyes, calificó esta vuelta atrás en el pacto laboral de "muy grave", máxime después de la lucha del colectivo para sacar adelante la creación de 189 puestos de empleo y la cobertura de alrededor de 300 plazas vacantes en la administración y de su dotación presupuestaria en el ejercicio de 2009, todo ello con el telón de fondo de la pugna entre críticos y vieristas por mor del proyecto de Presupuesto elaborado por la edil de Hacienda, Nieves Hernández, que dejó sin consignación económica el pacto laboral firmado por Carrillo.

Entonces, la llamada a filas de los sindicatos para respaldar al delegado de Personal y la amenaza de los trabajadores de elevar el incumplimiento del pacto laboral ante el juez forzaron una salida en el Pleno de febrero pasado, cuando todos los grupos aprobaron la inclusión de los acuerdos laborales en las cuentas de 2009, que implica una inversión faseada en el tiempo de 19 millones de euros.

Así fue hasta el pasado jueves, cuando el texto fue retirado por el gobierno local del orden del día de junta de gobierno para su ratificación bajo el argumento de la existencia de informes del secretario municipal que alertaban de la presunta ilegalidad de los acuerdos pactados, una marcha atrás que terminó por precipitar la decisión del edil de abandonar el Consistorio.

De los Reyes consideró "lamentable" el hecho de que en los últimos tres años los empleados municipales hayan estado bajo el mando político de hasta cuatro concejales de Recursos Humanos, como han sido Nieves Hernández, Alfonso Mir, Emilio Carrillo -todos ellos socialistas- y el que será su sucesor, cuyo nombre debe decidir el alcalde en un nuevo decreto de delegación de funciones. "Así es imposible tener una política continuísta en materia de Personal", subrayó, agregando que la persona que venga "tendrá en principio credibilidad cero, porque llevamos tres años firmando acuerdos que el Ayuntamiento incumple, en parte o en su totalidad".

Carrillo se reunirá hoy con el secretario general del PSOE de Sevilla, José Antonio Viera, para oficializar su decisión de dimitir y dar cuenta a la dirección provincial del partido del cese voluntario en Recursos Humanos como hiciera anteriormente en Urbanismo, entonces, por "pérdida de la confianza" que tenía depositada en el alcalde.

Carrillo deja en manos del partido el acta de concejal que ostenta y será la ejecutiva provincial la que decida si el edil debe continuar como concejal aunque sin responsabilidad de gobierno -sólo asistiría a los plenos- o por el contrario salir de Plaza Nueva y correr la lista electoral del PSOE un puesto más. En cualquier caso, su sustitución no pasaría por un delegado de libre designación en función de la aplicación de la Ley de Grandes Ciudades, ya que los tres dediles -elección a dedo por el alcalde- que corresponden a Sevilla por su circunscripción están cubiertos en los nombres de Maribel Montaño (Cultura, Comunicación y Portavocía) y Emilia Barroso (Bienestar Social) por el PSOE, y Jon Ander Sánchez (Empleo) por IU. El correturno en la candidatura electoral del PSOE implicaría la entrada en el gobierno de Cristina Galán, actualmente empleada por el grupo municipal del PSOE en la Portavocía municipal.

Fuentes de la Portavocía del gobierno local declinaron ayer valorar las repercusiones de la dimisión de Carrillo en tanto en cuanto dijeron no tener constancia directa de sus intenciones para renunciar a su cargo en Personal. El grupo municipal socialista aguardará al término de la reunión convocada hoy en el PSOE provincial para emitir su opinión al respecto.

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